La Federación de Mujeres Cubanas en Granma (FMC), ha acentuado su mirada hacia el empleo y empoderamiento femenino, con el convencimiento de que en el ascenso aún posible en ese sentido, lo esencial es la calidad que se logre en el proceso.
En síntesis, se trata, de que al puesto o al cargo de dirección de que se trate, accedan las mujeres no solo por su condición genérica, como principio de equidad, sino lo hagan quienes puedan mejor desempeñarse por su calidad y capacidad.
Con esa claridad, trascendió el análisis de tal asunto, en el pleno del comité de la organización, celebrado en Bayamo, y en el cual se evaluó cuanto se ha ido ganando en esa dirección.
De hecho, 90 mil 816 granmenses realizan labores en entidades estatales, y representan el 49,9 por ciento de los empleados en dicho sector, en tanto de manera particular, han accedido más en las responsabilidades administrativas, los puestos diseñados para técnicos y profesionales, y los trabajos de servicios, en cuyos universos ocupan el 74, el 66,7 y el 49,2 por cientos de los ocupados, en ese orden.
Los datos de las dos primeras categorías citadas, expresan por sí mismos, lo logrado por la masa femenina en su preparación profesional, su creciente incorporación a estudios técnicos y universitarios, y su pertinencia para dirigir importantes procesos productivos y de servicios.
Por razones que luego valdría la pena estudiar, todavía su presencia es menor en el sector no estatal general (13,3 por ciento), aunque logran un discreto incremento entre los trabajadores por cuenta propia.
Al cierre del 2015, eran mujeres alrededor de la mitad de los dirigentes del territorio; sabido es el crecimiento entre las dirigentes partidistas y de las asambleas municipales del Poder Popular, aunque se precisa tenerlas más en cuenta en la conformación de los consejos de administración.
Hay un camino no solo emprendido, sino superado en comparación con años anteriores, y en lo que se haga para seguir avanzando, debe primar el principio–así lo entendió el pleno-, de promover a las más eficientes.
En ese espacio fueron centro de debate, también, el incremento del embarazo en la adolescencia y las acciones del territorio para modificar tal hecho, y el proceso de declaración de estructuras de base en 56 aniversario de la organización.
Asimismo, las integrantes del pleno sometieron a consulta los documentos aprobados en el VII congreso partidista, entre estos la conceptualización del modelo económico y social cubano, proceso que recibirá de las féminas, entre otras respuestas, una mayor contribución al reto de elevar la formación de valores en el seno familiar.