Ginebra.- El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Fillipo Grandi, solicitó hoy a la Unión Europea (UE) suspender el traslado de refugiados rumbo a Hungría ante posibles deficiencias en la seguridad de la estadía.

Según estimó Grandi en un comunicado, la situación genera una ‘profunda preocupación’ en el seno del Acnur, a raíz de la nueva ley que exige un periodo obligatorio de detención para todos los migrantes que lleguen a suelo húngaro.

De esa manera, las llamadas medidas de emergencia promovidas por el primer ministro magiar, Viktor Orban, aseguran mayores controles para los solicitantes de asilo y persiguen la expulsión inmediata de todo migrante que entre al país de forma irregular.

A entender del Alto Comisionado, dichas condiciones entran claramente en conflicto con la denominada Convención de Dublín, activa desde 1997 e ideada para racionalizar los procesos de postulación de aspirantes a clasificar como refugiado político.

De acuerdo con estadísticas oficiales, desde la entrada en vigor de las medidas adoptadas por el gabinete de Orban, el pasado 28 de marzo, más de 100 nuevos solicitantes se mantienen ‘detenidos’ en contenedores de almacenaje ubicados cerca de la frontera y rodeados de alambres, entre ellos niños y mujeres.

‘Debido al empeoramiento de la situación de los solicitantes de asilo en Hungría, insto a los Estados (de la UE) a suspender cualquier traslado a este país, hasta que las autoridades húngaras adopten prácticas y políticas en línea con las leyes europeas e internacionales’, indicó Grandi.

Finalmente, el político italiano alertó sobre posibles ‘graves casos de malos tratos y violencia contra las personas que cruzan la frontera hacia Hungría’, concluyó.

Desde 2015 el continente europeo afronta una crisis migratoria de proporciones épicas, considerada la mayor desde la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), con cifras de migrantes que superan el millón de personas que huyen de la guerra en países como Iraq, Afganistán y Siria.