Washington-. Al menos 12 personas murieron como consecuencia de las inundaciones provocadas por una gran tormenta que afectó desde el jueves pasado Carolina del Sur y Norte, estados del sureste de Estados Unidos, confirmaron hoy las autoridades.

Encargados de emergencia de ambos territorios evalúan los daños causados en presas, puentes y carreteras por las históricas precipitaciones que se asociaron al paso del huracán Joaquín por el Atlántico, donde el naufragio del carguero estadounidense El Faro cerca de las Bahamas, sumó otras 33 víctimas.

Las inundaciones provocaron además numerosos cortes de electricidad, el cierre de importantes autopistas como un tramo de 144 kilómetros en la Interestatal 95, la falta de agua potable y la evacuación de más de 40 mil personas.

Las compañías South Carolina Electric and Gas y Duke Energy indicaron que el servicio fue restablecido para la mayoría de los afectados, y de más de 25 mil clientes sin fluido el lunes, apenas un millar aún esperaban la reanudación del servicio.

Asimismo autoridades de transporte dijeron que cerca de 500 carreteras y puentes todavía presentaban afectaciones y permanecían cerrados al tránsito.

Mientras tanto el gobierno de Carolina del Sur pedían a las personas que donaran agua embotellada para los evacuados y advertían que a causa de la rotura de cañerías el liquido para el consumo humano debía ser hervido en particular en áreas de Columbia, donde agentes de la policía distribuyeron siete mil botellas de agua en menos de dos horas.

Según las autoridades demorará semanas en que se pueda pasar a la normalidad luego de las afectaciones causadas por la tormenta que califican de histórica.

La gobernadora del estado, la republicana Nikki Haley, alertó a varias comunidades que pese al cese de las precipitaciones que dejaron acumulados cercanos a los 350 milímetros desde el jueves, el escurrimiento descendía hacia las zonas bajas de la costa y podría causar más inundaciones y desplazar a más vecinos.