Londres, – Los niveles de anticuerpos contra la Covid-19 disminuyen rápidamente después del contagio, por lo que existe el riesgo de contraer la enfermedad varias veces, alertó hoy el Colegio Imperial de Londres.

Según el estudio, de las 365 mil personas que se sometieron a la prueba en Inglaterra entre junio y septiembre pasados, 60 de cada mil tenían anticuerpos en un primer examen, pero unas semanas después, la cifra disminuyó a 40 por cada mil.

La inmunidad decae bastante rápido. Apenas han pasado tres meses desde nuestra primera ronda de pruebas y ya tenemos una disminución de un 26 por ciento de los anticuerpos, explicó la investigadora Helen Ward.

La especialista de la universidad londinense agregó que el resultado de la investigación sugiere que la llamada inmunidad del rebaño, promovida por algunos asesores del gobierno británico al inicio de la pandemia, resulta inalcanzable en el caso de la Covid-19.

Cuando tienes que 95 personas de cada 100 todavía son susceptibles de contraer el virus, estamos muy, pero muy lejos de cualquier cosa parecida a una protección a nivel población contra la propagación creciente, aseveró Ward.

El director de la investigación, Paul Elliott, recalcó, por su parte, que tener anticuerpos al coronavirus no hace que esa persona sea inmune a la Covid-19, porque todavía se desconoce el nivel de inmunidad que se adquiere o cuánto dura esta.

Toda aquel que dé positivo a una prueba de anticuerpos debe seguir las medidas de distanciamiento social establecidas, someterse a un examen del virus si presenta síntomas y usar mascarilla donde sea obligatorio, apuntó.

El estudio, en el que participó también la agencia encuestadora Ipso Moris, arrojó además que la “caída” fue mayor entre las personas mayores de 75 años, comparado con los grupos más jóvenes, y entre los asintomáticos con respecto a los que padecieron los síntomas de la enfermedad provocada por el coronavirus SARS-CoV-2.

También se detectó que los trabajadores de la Salud exhibieron una respuesta inmune más alta, algo que los investigadores del Imperial College creen que obedece a una exposición al virus más prolongada.