La Habana, – La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) apoyará esfuerzos de Cuba en la implementación de políticas nacionales para la informatización de la sociedad y la gestión del conocimiento para el desarrollo sostenible, para el período 2020-2024.
Así afirmó en Twitter Yahima Esquivel, embajadora y Representante Permanente de la Isla ante la UNESCO, quien compartió un trabajo que aparece en la página de la organización sobre el tema.
El mismo señala: “en el complejo entramado informacional y comunicacional de las sociedades del conocimiento actuales, las habilidades para crear, acceder, compartir y preservar información son clave para para la vida, el estudio y el trabajo. Son, además, una necesidad para enfrentar los principales los retos del desarrollo sostenible”.
Destaca que la UNESCO trabajará en el período 2020-2024 en la concertación de estrategias destinadas a fomentar conocimientos, habilidades y competencias en la población cubana para su inserción plena en la sociedad de la información y el conocimiento.
Por medio de la generación de espacios de diálogo entre tomadores de decisiones, representantes de la academia, proveedores de información, ministerios, instituciones de la sociedad civil y otras partes interesadas en el tema, la organización contribuirá a generar documentos de política e iniciativas orientadas a forjar ciudadanos con las competencias necesarias para crear, acceder, compartir y preservar información de forma ética y responsable.
En alianza con la Subcomisión de Comunicación e Información de la Comisión Nacional Cubana de la UNESCO y otros socios relevantes, la Oficina Regional de Cultura para América Latina y el Caribe de la UNESCO desarrollará diagnósticos preliminares y apoyará la formulación de recomendaciones para la creación de estrategias multisectoriales para la promoción de la Alfabetización Mediática Informacional (AMI), refiere.
La AMI, explica, es un proceso de formación de conocimientos y competencias que faculta a las personas para comprender las funciones de los medios de comunicación y otros proveedores de información, para evaluar críticamente los contenidos de los medios y para tomar decisiones informadas como usuarios y productores de información y conocimiento.
Añade que una ciudadanía alfabetizada mediática e informacionalmente, está mejor preparada para hacer un uso pleno y ético de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y para contribuir más decisivamente al desarrollo sostenible.
Como parte de esa contribución participa activa y responsablemente en los asuntos públicos sobre la base de acciones sustentadas en decisiones informadas y cuenta con las herramientas necesarias para combatir la desinformación.
“Con 7,1 millones de usuarios conectados a internet y un crecimiento vertiginoso de quienes acceden a redes sociales, Cuba tiene una participación cada vez más activa en la esfera pública digital”, expresa el texto.
Asimismo, asevera, la implementación oportuna de programas de capacitación para sacar el máximo provecho a las posibilidades que ofrecen las TICs, resultará crítica para desarrollar nuevos y mejores servicios de comunicación, información y conocimiento y para evitar la proliferación de males como el discurso de odio en internet y el ciberacoso.
Igualmente, la alfabetización mediática e informacional será clave para combatir el fenómeno de la desinformación que, como ha demostrado la desinfodemia generada en torno a la COVID-19, es un fenómeno con imprevisibles repercusiones para el bienestar colectivo, concluye.