Las diversas estructuras del  Sindicato  Nacional de  Trabajadores Azucareros  (SNTA )en Granma tienen ante sí un notable y doble reto: optimizar su  trabajo  orgánico, de hecho  mayoritariamente positivo  y contribuir desde cualquier tribuna  a la producción cañero- azucarera  para  promover el cumplimiento de la actual zafra azucarera.

El balance del acontecer gremial  correspondiente al  año 2018 devino análisis exhaustivo de la calidad de las reuniones con aseguramiento a los temas de mayor impacto en la producción de azúcar.

Particularmente debatido  fue  el fortalecimiento de la contribución  Mi aporte  a la Patria,  que también ahonda en su origen histórico y principios martianos  retomados por Fidel en la década de los 80 y que  guarda vigencia plena.

Es loable el sistema de control, seguimiento y exigencia  para cumplir de modo cabal la vinculación sindical  con la base, velar por  la  eficacia en la realización de activos sindicales, reuniones ejecutivas y asambleas de afiliados y también la labor encaminada  a lograr mayor estabilidad de los cuadros para desterrar la  fluctuación, aún presente.

Asimismo resulta cardinal    instruir e influir para que la  calidad presida  el proceso de elaboración y actualización de los convenios colectivos de trabajo.

También es loable toda   labor para mantener a raya  ilegalidades, corrupción y  robos  con énfasis en la guardia obrera, no solo nocturna,    como efectivo remedio.

Sobresale en el sector la atención a las personas en zafra y sus familias  por parte del sindicato especialmente los sistemas de pago que aún necesitan perfeccionamiento.

El llamado de la máxima dirección del país  es no solo a la producción de azúcar a lo cual están comprometidos los del gremio , sino también  a la obtención de alimentos  para satisfacer sus propias  necesidades,  e imprimir  la mayor calidad a la siembra de caña por sus valores estratégicos.

Asimismo la  conveniencia de  todo   tiempo y espacio disponible para dar a conocer información y orientaciones emanadas de instancias superiores y-  ahora en plena campaña- los cambios de turno en el central pueden devenir espacio  para ello, sobre todo para redoblar  los esfuerzos  tendentes al cumplimento ya  en la recta final de la campaña.

En eso este redactor considera muy valioso  lo expresado por Israel Carrasco Vargas,  funcionario de Comité provincial del Partido, con respecto a  la   importancia  del  movimiento sindical  como  aglutinador de   esfuerzos para concretar  el plan de azúcar, esa es la meta cardinal  de los azucareros granmenses, si tienen  lo más importante:  la caña, y si  el principal problema actual es la economía, esa es la cuestión  a discutir  obligadamente en  las asambleas de afiliados.

La zafra es ahora,  recordemos que para un camino largo lo importante es cada paso efectivo, en este caso cumplir  la tarea diaria, acompañados por su combativo sindicato, los azucareros  deben  dedicarle alma corazón  y vida a ese afán.