A miles de niños cubanos que culminan el tercer grado en los próximos días, les cambiaron hoy la pañoleta azul de pioneros Moncadistas por la de color rojo de pioneros José Martí, acto con el que inician una etapa en su organización infantil caracterizada por mayores responsabilidades en los destacamentos y colectivos.
Las ceremonias que con ese fin se realizan en las escuelas, están dedicadas a rendir homenaje al General Antonio Maceo y al Comandante Ernesto Che Guevara, en los aniversarios, este 14 de junio, 172 y 89 de sus natalicios.
En Granma reciben los atributos ocho mil 967 pioneros y la escuela 21 de Octubre, de la ciudad de Bayamo, fue sede del acto provincial, como reconocimiento al funcionamiento en ella de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM).
En ella, junto a los maestros, padres y estudiantes de sexto grado, participaron en la realización del cambio de atributos a 51 alumnos, Gelkis del Toro Pérez, primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en Granma, Yulieski Tamayo Verdecia, presidente provincial de la OPJM, Yoandris Castro Osorio, primer secretario de la UJC en Bayamo, Adriana Aguilar Alberja, presidenta de la OPJM en Bayamo quien, además, dio la bienvenida a los nuevos pioneros José Martí, Nelson Rodríguez Capote y Yordanis Ayala Tamayo, funcionarios de Educación.
Para Erica L. Rondón, recibir los nuevos atributos pioneriles es motivo de “felicidad y amor” y la compromete a ser buena estudiante; a Delenis Martínez le causa “mucha felicidad”, y a Lilian Dávila “una gran emoción y una gran felicidad”.
La pañoleta es el atributo fundamental de los pioneros, el símbolo que los identifica como miembros de la organización de la OPJM. Tiene la forma de un triángulo isósceles y sus vértices significan estudiar, trabajar y luchar por las conquistas de la Revolución. Los pioneros Moncadistas usan la pañoleta de color azul, que representa el cielo de la patria, y los José Martí del primer nivel, la pañoleta roja como símbolo de la sangre derramada por los héroes y mártires cubanos.
La OPJM trabaja en desarrollar en los niños y adolescentes el interés por el estudio y el sentido de responsabilidad social, el amor a la Patria y a los pueblos del mundo. Se esfuerza por desarrollar en ellos hábitos de trabajo, que conozcan y puedan sentir orgullo por los hechos relevantes de la historia cubana.
Por la diversidad de edades comprendidas entre los grados que abarca y diversidad de intereses de sus miembros, está dividida en dos etapas: Moncadista (de primero a tercer grado, y José Martí, de cuarto a noveno grado, A su vez, esta última la componen dos niveles: el primero, de cuarto a sexto grado, y segundo, de séptimo a noveno.