Beijing, – Beijing, la capital de China, será sede en mayo de 2018 del segundo congreso mundial sobre el Marxismo, al cual deben asistir más de 300 expertos para discutir la vigencia de ese pensamiento en el siglo XXI.

Según Gu Hailiang, del comité organizador, la cita sesionará en una universidad de la ciudad del 5 al 6 de mayo en coincidencia con el 200 aniversario del nacimiento de Karl Marx y los 40 años del comienzo de la reforma y apertura de este país.

Se tratará de un evento significativo para la investigación mundial del marxismo y del socialismo científico, comentó Gu a periodistas.

El evento transcurrirá bajo el lema ‘El marxismo y el mundo y China actuales’. Tendrá 17 subforos que debatirán temas como la solución china y el enfoque de modernización por parte de los países en desarrollo.

Gu añadió que la cita ayudará al círculo académico mundial a interpretar ‘el camino, la teoría y la experiencia’ del gigante asiático en incorporarle nuevos elementos a esa corriente ideológica.

Precisamente durante la apertura del 19 Congreso del Partido Comunista de China, el líder de esa agrupación y presidente del país, Xi Jinping, planteó las pautas del ‘Pensamiento sobre el socialismo con características chinas en una era nueva’, como él mismo lo definió.

Según el máximo dirigente, la idea es persistir en el marxismo, solidificar el comunismo, así como cultivar y practicar los valores socialistas esenciales.

También se busca enriquecer las corrientes ideológicas anteriores, pero a la vez guiar al país hacia la renovación nacional y el establecimiento de una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos.

Establece que para lograr esos propósitos todos los ciudadanos chinos deben disfrutar por igual del desarrollo y la prosperidad, además de hacer énfasis en modernizar la forma de gobernanza, actualizar las leyes y fortalecer las fuerzas armadas.

En el plano diplomático, el pensamiento propone incentivar una nueva forma de relaciones internacionales que contribuya a garantizar un futuro mejor para la humanidad.

Sin embargo, Xi insistió en que materializar esas metas requiere de una lucha decidida contra las contradicciones y un fuerte compromiso en los proyectos y las causas.