El Comercio y la Gastronomía en Granma, vive por estos días la renovación, acaso más intensa, de todos los tiempos.

Asiste el sector, en cada uno de los municipios del territorio, a una transformación física y espiritual, derivada de un proceso nacional de perfeccionamiento de las unidades minoristas de subordinación local, especialmente las de la gastronomía, que está en el centro de las prioridades del Ministerio de Comercio Interior (MINCIN), junto al seguimiento o atención permanente de un grupo de programas que impactan en la calidad de vida de la población.

El citado proceso, previsto a concluir en el 2021, tiene entre sus objetivos supremos, perfeccionar la empresa estatal socialista, como lo exige la actualización del modelo económico, y potenciar la autonomía del municipio tal cual se recoge en la Constitución de la República, y con ello brindar al consumidor el servicio que merece, todo lo cual debe conducir a una radical transformación del ramo.

Con alcance a las entidades empresariales y estatales subordinadas a las administraciones locales del Poder Popular, incluye acciones de carácter financiero, funcional y de reordenamiento de las actividades de gastronomía, servicios personales y técnicos, venta de mercancías y alojamiento.

La Gastronomía en ese universo, es la actividad que inicia el proceso, decisión del país que tuvo en cuenta la amplia red de unas ocho mil unidades, y ser esta, a su vez, la rama con mayor deterioro tanto de su infraestructura como en su funcionamiento.

RENOVACIÓN ESTRUCTURAL LOCAL

Aunque no precisamente el sector en Granma refleja tal deterioro estructural, porque sistemáticamente se han desarrollado aquí programas de rehabilitación, con referencia para otros territorios cubanos, igual se produce una revolución constructiva de amplio alcance.

Alrededor de cuatro millones de pesos se ejecutan este año en más de medio centenar de obras, la mayor parte de estas para terminar entre el 20 y el 30 de diciembre, como homenaje al nuevo aniversario del triunfo de la Revolución cubana.

José Fontanals Remón, director del Grupo Empresarial del Comercio en Granma (GECOG), insiste en destacar que en general no se trata de crear unidades nuevas (aunque surgen donde son necesarias), sino lograr que las que existen, mejoren tanto desde el punto de vista de la calidad de los servicios e imagen como de las condiciones de trabajo de todos los colectivos.

“Entre las prioridades estas los centros de elaboración, reconocidos como la base para mantener abastecimientos más estables, y las sedes de las entidades municipales, pues la Gastronomía ha ido creando mucha infraestructura de prestación de servicios, pero muy poco a lo interno”.

Con ese último concepto, que tomando como base un viejo refrán, bien pudiera decir: dime cómo andas y te diré que haces, se ha producido un cambio importante en la imagen (de la que muchos organismos y entidades se han olvidado) desde la sede del Grupo y que se extiende hasta las estructuras de base.

Este programa reconstructivo tiene otros elementos llamativos, uno la exquisitez de los diseños; otro la voluntad de recuperar obras insignias de los municipios y que por mucho tiempo estuvieron inactivas, como el hotel de Jiguaní, que después de casi dos décadas abandonado, volverá con lujo y confort en sus 11 habitaciones, una barra y el legendario ranchón Guaguaní (aledaño al hospedaje) para servir a los jiguaniseros y también a los visitantes foráneos.

La ampliación o incorporación de nuevos servicios a unidades ya existentes, el mayor aprovechamiento de los espacios, es otra efectiva decisión, de la cual dará fe, por citar un ejemplo, La Lisetera Cayo Confite, en Manzanillo, y que, en su segundo nivel, contará con un área para ser alquilada para actividades festivas (tanto para entidades como particulares), con mobiliario para un centenar de comensales, baños, cocina y cantina.

Es imposible reseñar todas las obras en las cuales se trabaja, y a las que por invitación del GECOG accedió La Demajagua, pues se trata de una revolución constructiva diseminada por doquier, y en las cuales laboran con intensidad fuerzas de entidades estatales, del Fondo de Bienes Culturales, de la corporación Caguayo, del sector de cuentapropistas, de la propia brigada constructiva del grupo y otras.

Baste solo mencionar la recuperación del demandado Mirador de Guisa, municipio en el cual se trabaja, además, en una taberna, piano bar, juguera y café serrano; La Playita de Yara; restaurante Guamá de Cauto Cristo; el ranchón de la Cuadra de la excelencia en Bayamo (municipio que desde antes tiene recuperadas más de una treintena de obras); nuevo restaurante y mercado ideal de Media Luna, y otras en todos los municipios.

El programa, aunque se concentra ahora en la estructura gastronómica, también alcanza a algunas unidades del comercio, como bodegas, cuya reparación responde a planteamientos formulados por los electores en asambleas de rendición de cuenta.

COMPETENCIA Y SENSIBILIDAD

Un nuevo centro de capacitación fue recién inaugurado por el GECOG, en correspondencia con otro de los objetivos específicos del perfeccionamiento, como es la transformación del capital humano, fortalecer las competencias y requisitos de los cuadros designados para dirigir los establecimientos y de los funcionarios a nivel de municipios y provincia, de forma tal que los seleccionados sepan administrar los recursos e infraestructura, tengan conocimientos y reúnan las cualidades idóneas.

Poco más de cien estudiantes conformó la matrícula con que se estrenó el centro, entre ellos trabajadores y directivos de las cuatro unidades seleccionadas en la provincia para el experimento del perfeccionamiento: restaurantes bayameses 1513 y La Cubana, el complejo recreativo-cultural Guajiro Natural y yarense restaurante El Danubio.

Elementos de contabilidad y finanzas, comunicación social, inocuidad de los alimentos, trabajo con las plataformas digitales, mejores prácticas de elaboración, y otras materias recibieron estas unidades y se incluyen de manera general en los programas de capacitación para las unidades que cuando entren en perfeccionamiento, deben ser capaces de diseñar y aprobar su estructura, gestionar sus recursos, manejar una autonomía financiera y comercial…

Los estudiantes también reciben conocimientos elementales del idioma inglés, para dar la bienvenida a los clientes extranjeros, invitarlos a la mesa e informarles sobre las ofertas disponibles.

Y junto a esas materias que tributan a la competencia, destaca sobremanera, el aprendizaje de elementos básicos del lenguaje de señas, una iniciativa formidable de Laiyen Lizet Liens Acuña, comunicadora del grupo, y que en cada unidad donde se practique expresará sin dudas ese valor insustituible que es la sensibilidad.

El centro, para próximos cursos, concebirá la realización de actividades prácticas, pues fue diseñado con pequeñas áreas para el ejercicio del montaje de una mesa y habitación, preparación de un plato principal, un coctel, en fin, para comprobar in situ los conocimientos recibidos en clases.

EL RETO DE PERFECCIONARSE

De acuerdo con José Fontanals Remón, director del GECOG, se han ido cumpliendo en definitiva los pasos que exige el proceso de perfeccionamiento, y se sientan bases para el saneamiento financiero a nivel de empresa

En un próximo y segundo momento está prevista la capacitación de 66 administradores de entidades ya avaladas a nivel de ministerio, y 18 unidades que pasarán al perfeccionamiento en una segunda etapa.

En general y a pesar de la situación económica, el grupo en la provincia ha venido trabajando en mantener y seguir desarrollando el sector de cara a este proceso, y ello ha estimulado junto al impulso de un grupo importante de obras de reconstrucción, el mejoramiento de las condiciones tecnológicas, con la instalación de alrededor de 80 computadoras, informatización del sistema de Oficoda, y la instalando en las unidades que se estrenan en el perfeccionamiento, de un código QR personalizado que permite a los clientes acceder a la carta y pagar la factura en plataforma digital.

Pero, lo más importante, como precisa Fontanals Remón, es que cada labor, cada acción, tanto renuevo, conduzcan a la meta esencial: elevar la calidad del servicio al pueblo.

Pies de fotos

-En el mirador de guisa, dos salones, la cocina, la terraza y cuatro cabañas, se prevén terminar antes de cierre de año

-El programa ha permitido la recuperación del restaurante Guaguaní, en Jiguaní, insignia de la localidad

-El programa constructivo también alcanza a Media Luna y el resto de los municipios costeros

-Jose Fontanals Remón: “Lo esencial es elevar la calidad del servicio al pueblo”