Conmemoran aniversario 120 de la batalla de Peralejo

Share Button
Por Orlando Fombellida Claro | 20 julio, 2015 |
0

Ludin Fonseca En Peralejo, a la vera de la carretera que por allí pasa, un sitio histórico presidido por un busto de Antonio Maceo sobre una base de concreto, testimonia que en ese lugar se desarrolló “la acción militar más importante ocurrida en territorio bayamés durante la contienda de 1895”, asegura el historiador Ludín B. Fonseca García.

Al cumplirse, este 13 de julio, 120 años de aquella acción, allí se dieron cita lugareños, estudiantes y dirigentes para, en representación de los granmenses, rendir homenaje a los mambises que la protagonizaron, con Antonio Maceo al frente.

Janio Salazar Zamora, presidente de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) en la Universidad de Granma, ratificó el compromiso del estudiantado cubano de ser fieles al legado de quienes lo dieron todo, incluso la vida, en aras de una Cuba libre y soberana.

La conmemoración, precisó el Historiador de Bayamo, constituyó, también, homenaje a Mariana Grajales, Madre de los Maceo y de la Patria, quien “transgredió los patrones culturales de su época por el rol protagónico desempeñado”, y cuyo bicentenario de nacimiento fue el 12 de este mes.

Con su vívida descripción de lo sucedido en aquel paraje, Ludín logra que sus interlocutores sientan el irrefrenable deseo del Titán de Bronce de derrotar al capitán general, Arsenio Martínez Campos, al cual se enfrentaba, por ser el artífice del Pacto del Zanjón. Y los del militar español de vencer a su contrario, por su irreverente y patriótica Protesta de Baraguá.

Y juntas oratoria e imaginación, se escucharon las voces de los jefes de ambas tropas, el olor a pólvora, a sangre caliente, el relinchar de caballos tan bravos como sus jinetes, el brillo de blandidos y temibles machetes; el toque de corneta anunciador de la muerte de un jefe ibérico, el general Fidel Alonso de Santocildes “el oficial español de mayor graduación caído en combate en los territorios de la actual provincia de Granma”.

Se ve a Martínez Campos asumir el mando de todas sus fuerzas e iniciar la retirada hacia Bayamo, a donde “llega esa misma noche con cerca de 400 bajas”; y al mulato que al decir de José Martí tenía tanta fuerza en la mente como el brazo, aceptar con rabia el hecho de no poder capturar a su enemigo por escasez de parque.

Las bajas mambisas suman 118 muertos y heridos.

Ludín Fonseca, puntualiza que la acción militar acontecida en la sabana de Peralejo hace 120 años “es una batalla por los cambios estratégicos que se produjeron posteriormente en la guerra de Cuba. Sus resultados no pueden ser vistos exclusivamente en su inmediatez, es necesario profundizar en las consecuencias manifiestas a largo plazo”.

Las secuelas de la derrota sufrida por Martínez Campos – cuyas fuerzas ascendían a unos mil 500 efectivos-, en el citado paraje bayamés, lo llevó a solicitar ser relevado y su sustituto, Valeriano Weyler y Nicolau, impone un sistema de guerra que causó la muerte a 300 mil cubanos, replicado más tarde por Adolfo Hitler.

“Después de Peralejo –puntualiza Ludín- la nación cubana enfrentó retos inéditos como la reconcentración de la población rural en pueblos y ciudades, la guerra total y la intervención , pero ninguno doblegó su decisión de luchar y alcanzar la independencia, primero contra el colonialismo español, después contra la dominación imperialista norteamericana.”

Asistieron a la conmemoración, los miembros del Buró provincial del Partido Aresqui Hernández Ramírez y Raubel Gutiérrez Jiménez, Francisco Escribano Cruz, vicepresidente de la Asamblea provincial del Poder Popular y José Maceo Martí, primer secretario del Partido en el municipio de Bayamo.

Monumento Batalla de Peralejo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *