Con beneplácito, recibieron habitantes de Bayamo, Manzanillo y otros municipios la segunda fase de la venta de módulos de cocinas de inducción correspondiente al plan previsto para 2015 (27 mil unidades), que fue completado en Granma el fin de semana último.
En la primera venta hubo desorden, incomprensiones, incongruencias: comercializar gran cantidad de equipos en mercados industriales, acarreó aglomeraciones junto a la censurable actividad de coleros y revendedores; ahora la falta de información oportuna aportó irritación a quienes en cuanto vieron la llegada de las cocinas a las tiendas armaron “sus estrategias de compra”.
Héctor Cordero Hernández, director del Grupo empresarial de Comercio y Gastronomía (Gecop) asevera que, a partir del justo reclamo de la población, las ventas acontecieron en la periferia de las ciudades, “y en la medida en que sigan entrando los módulos iremos rotando por los distintos consejos populares, para viabilizar la compra”.
“Ello responde a la sustitución gradual de las otras hornillas ya obsoletas, cuya reposición por la vía personal implica gastos probablemente equiparables a los 500 pesos de las actuales, más modernas y económicas.
“El plan para 2016 augura mejoría, pues en la medida en que la población adquiera estos enseres, habrá menos personas necesitadas y la demanda bajará; aparejado a ello, ya Granma fue aprobada en el programa de gasificación para el presente año, lo cual contribuirá también a disminuir el consumo eléctrico.
Como experiencia: antes esperábamos completar el ciento por ciento de los equipos en cada mercado; ahora en cuanto lleguen al lugar fijado, los pobladores podrán adquirirlos y así evitar, reitero, indisciplinas y largas esperas.
“Todo ello, claro, en coordinación con los suministradores: la Empresa Comercializadora Importadora Divep entrega a la Universal y esta a la red minorista; trataremos por todos los medios que la distribución sea al unísono, para ello debemos afinar la cadena del transporte….
“Ahora nos fuimos a bodegas de la periferia, rurales incluso, de Bayamo, Manzanillo, Niquero, Media Luna, Campechuela y Guisa con muy buena acogida de sus pobladores, el resto de los territorios fue completado durante la primera vuelta.
“Es destacable la oportuna cooperación de los compañeros del Ministerio del Interior para garantizar el orden en las colas, tomamos de conjunto varias medidas: entre ellas eliminar las listas, por eso quienes estaban cuando empezó la venta compraron, de esa manera lo haremos en lo adelante.
“Si el equipamiento llega y vendemos rápido no damos dejamos resquicios para el desorden, aunque hubo algunas demoras porque hubo atrasos en el completamiento; no obstante, comenzamos el sábado 19 y prácticamente terminamos ese propio día; en cada lugar dejamos la cantidad que se pudiera vender en un día…
“Estas cocinas tienen garantía por tres meses; si en ese período hay roturas, el interesado debe dirigirse al taller de la Empresa de Servicios, cuyos mecánicos, capacitados en cursos especiales en Santiago de Cuba certificarán su efectividad o no, si ellos dictaminan no tienen arreglo, estamos en la obligación de reponer el equipo.
Hernández Cordero significó asimismo la importancia de que quienes compren conozcan al dedillo la cuestión de la garantía, aunque se explica por dependientes y técnicos..
“El año pasado existía un margen del uno por ciento para reposición, pero la cantidad de hornillas con problemas rebasó ese porcentaje, ya hicimos la reclamación…si en este caso ocurre lo mismo procederemos de igual manera.
Cordero Hernández reconoce que si este mismo diseño hubiera sido empleado en la venta del año pasado, hubieran podido abarcarse muchos más lugares.
Sin duda, insistimos en que una información oportuna habría limado muchas asperezas, pero indudablemente en esta ocasión las luces fueron más que las sombras, ese es el camino a seguir.