El dispositivo no sólo es lo suficientemente diminuto para encajar en un circuito integrado (chip), sino que también tiene la capacidad de recuperar datos bajo demanda, destacaron los autores en el trabajo divulgado en Science.
El chip está elaborado con cristal de ortovanadato de itrio con pequeñas cantidades de neodimio, que forman una cavidad.
El aparato creado por científicos italianos y estadounidenses tiene una forma rara, parecido a una barra de chocolate Toblerone.
Al decir de Tian Zhong, ingeniero molecular de la Universidad de Chicago, las ranuras hacia los extremos del dispositivo se comportan colectivamente como dos espejos, uno a cada lado.
Según los expertos, hasta ahora las memorias cuánticas construidas han sido demasiado grandes para ponerse en un chip, un requisito necesario para las aplicaciones prácticas.