Con la ventaja de poder disponer este año del 50 por ciento de los ingresos de la contribución territorial, en todos los municipios de la suroriental provincia de Granma, es palpable ese aporte para el desarrollo económico y social

Un reciente análisis del tema en el territorio, da cuenta que tal financiamiento ya no solo se destina al mejoramiento de unidades de servicios y obras sociales, sino también a financiar gastos del sector presupuestado y del sistema empresarial.

Inversiones del sector de Comunales, mejoramiento de vías públicas, compra de módulos de parques, jarrones y adoquinado de calles se incluyen entre los destinos de ese presupuesto en Bayamo, capital provincial.

En varios municipios como Manzanillo y Bartolomé Masó, una parte de ese aporte permitió la reparación de consultorios médicos, en tanto, en Jiguaní la contribución ha sido utilizada este año para la reparación y mantenimiento de varias unidades productoras de alimentos, tal es el caso de la panadería Castillo y el Centro de elaboración.

La compra de máquinas mezcladoras para entidades de conservación y rehabilitación de la vivienda de Jiguaní y Río Cauto; la adquisición de mangueras plásticas para el acueducto de la comunidad Vicana Abajo, en Media Luna, y el aporte de financiamiento a  la Empresa agropecuaria Bayamo, para el programa de desarrollo de carne cunícula destinado a la población, son ejemplos de cómo se ha empleado la contribución territorial, también, a favor del sector empresarial.

Este año Granma prevé disponer por ese concepto de alrededor de 21.2 millones de pesos, y en la estrategia diseñada para su mejor aprovechamiento está el destinarlo a actividades que generen nuevos ingresos, los cuales contribuyan a su vez a engrosar los aportes para el desarrollo local.