El ministro cubano de Relaciones Exteriores enfatizó en la red social Twitter que Washington realiza una actividad ilegal de vigilancia y persecución a buques y amenaza a compañías navieras, empresas de seguro y gobiernos para impedir la llegada de combustible al país.

Rodríguez convocó a la comunidad internacional a impedir ese acecho por parte de la administración de la Casa Blanca que, según apuntó, afecta la integridad del pueblo cubano.

También pidió apoyo para detener lo que llamó hostilidad, insensatez e irresponsabilidad del Ejecutivo del país norteño.

Por ese tipo de acciones de Estados Unidos, que evidencia el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero, más de una empresa extranjera del banco de proveedores de suministros importantes para la mayor de las Antillas resultan afectadas, afirmó a Prensa Latina, Mario Larrinaga, director adjunto de la comercializadora Imeco, del Ministerio de la Construcción (Micons) de Cuba.

El directivo apreció que aun cuando la actividad siempre ha estado afectada por el cerco estadounidense, la situación se ha vuelto más tensa en los últimos años, desde el inicio del mandato de Donald Trump en la Casa Blanca.

‘Entidades que mantienen una relación de negocios con Imeco son obligadas a cambiar sus cuentas bancarias; han tenido que cancelar operaciones en bancos por el asedio de Washington al comercio de la nación caribeña’, denunció Larrinaga.

Lamentablemente, aclaró, esta situación es una de las causas del retraso de la entrega de recursos constructivos necesarios para obras esenciales para el desarrollo socioeconómico de la isla.

Apuntó que este escenario golpea a diario la gestión de su empresa que se encarga, fundamentalmente, de la importación y exportación de los insumos y materias primas para la industria de materiales de construcción y sus tecnologías.

En sentido general, señaló, atiende la edificación de obras sociales, viviendas, hospitales, escuelas y algunas instalaciones del sector turístico.

Asimismo, de acuerdo con el directivo, se aprecian en lo que va de año las pérdidas por la imposibilidad de las navieras de entrar a cargar en Cuba, otra medida de Washington para sembrar escasez en la nación caribeña en busca de un cambio de régimen acorde a sus intereses.

La prohibición unilateral de Washington malogró gestiones comerciales de la isla valoradas en más de cuatro millones 400 mil dólares por concepto de exportación de bienes y servicios, fundamentalmente de cemento y piedra de Algaba, en el periodo correspondiente de marzo de 2018 a abril de 2019, precisó el director adjunto de Imeco.

Recordó que a causa de las medidas coercitivas del gobierno estadounidense los barcos que llegan a Cuba directamente no pueden hasta 6 meses después atracar en puertos del país norteño.

Añadió que Cuba tiene que adquirir tecnología en Europa por no tener acceso a la norteamericana.

Apuntó que con el decursar de los años empresas estadounidenses compraron homólogas en el viejo continente, lo que tuvo como resultado la disminución de las opciones para la isla.

‘También hay productos que pudiéramos comprar o vender en Estados Unidos, pero los traemos de mercados distantes como China y Vietnam. Si vienen de esos países asiáticos, son más de 45 días de travesía; la demora de la llegada de estos provoca una tensión en el cumplimiento de algunos de los objetivos propuestos por las autoridades cubanas en función del beneficio del pueblo’, argumentó.

Larrinaga significó que un comercio estable y seguro con Estados Unidos permitiría traer a la isla esos mismos productos con muy buena calidad y en un tiempo muchos más rápido.

El funcionario de la comercializadora acotó que la falta de acceso al mercado estadounidense limita también las exportaciones cubanas.

Se refirió a las posibilidades de exportación de la mayor de las Antillas hacia el país norteño con productos como el mármol y el cemento para la zona del Estado de la Florida.

ESFUERZO COMÚN ANTE ASEDIO

Los trabajadores de Imeco ratificaron la disposición de continuar la búsqueda de soluciones para un buen desenvolvimiento de su labor, atendiendo a las difíciles circunstancias impuestas por el bloqueo estadounidense.

En un debate, subrayaron la importancia de la inteligencia colectiva en la elaboración del plan económico para 2020, sobre el cual destacaron la importancia de la conformación de un esquema flexible ante la incertidumbre que provoca el asedio de Washington, pero a la vez tenso en función de la eficiencia.

Pedro Hernández, director general, llamó a estar preparados ante la coyuntura que enfrentará la mayor de las Antillas el año próximo, en el cual, señaló, se prevé un recrudecimiento de la hostilidad del Gobierno norteamericano contra la mayor de las Antillas.

Lo anterior, advirtió, puede estar vinculado a las elecciones presidenciales en el país norteño y el secuestro de la política exterior estadounidense por un reducido grupo de la Florida, estado clave en esos comicios.

El directivo enfatizó en lo imperativo que resulta para Cuba hoy el aumento de las exportaciones, el ajuste de las importaciones a las necesidades reales de la nación caribeña y que Imeco se mantenga como parte de uno de los eslabones fundamentales en los encadenamientos productivos.

arb/lrd/ool

*Periodista de la Redacción Nacional de Prensa Latina.