Como resultado obtuvieron animales con una presencia reducida del virus CSFV en la sangre, síntomas leves y no mortales de la enfermedad.
Otra conclusión arrojada fue que la resistencia a la gripe podría ser transmitida establemente a la descendencia.
Pese a los logros, los expertos monitorean la seguridad y efectividad del método a medida que los animales genéticamente editados envejecen.
Según el académico Ouyang Hongsheng, autor de la investigación, el experimento podría replicarse de forma directa y efectiva en toda la población de cerdos y posiblemente en otras especies.
El estudio se conoce justo cuando China batalla contra una epidemia de la gripe porcina africana que obligó a sacrificar más de 600 mil cochinos desde agosto pasado en la nororiental provincia de Liaoning.