Moscú, – Estados Unidos busca una superioridad bélica sobre Rusia y China con el despliegue del tramo europeo de su escudo antimisil, denunció hoy el jefe de la dirección operativa del Estado Mayor ruso, Viktor Paznijir.
Pero Paznijir advirtió que su país de ninguna forma dejará sin respuesta los programas norteamericanos que Moscú considera son una amenaza para su seguridad nacional y rompen la estabilidad estratégica en la región.
Los planes de Washington para nada tienen relación con una supuesta amenaza de Pyongyang o de Teherán, sino con los deseos de obtener una superioridad militar sobre Rusia y China, consideró el oficial ruso.
A la República Popular Democrática de Corea, por sus condiciones técnicas, le es imposible aún crear una amenaza real para Occidente, comentó Paznijir.
Además, en el caso de Irán, después de la firma de un acuerdo con el sexteto mediador (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad y Alemania) sobre su programa nuclear, está fuera de lugar hablar de su presunta amenaza para Occidente, consideró.
Estados Unidos busca entonces una reducción de la efectividad del potencial nuclear ruso, mientras crea condiciones para asestar golpes decisivos con el fin de desarmar y descabezar su dirección militar, explicó.
Además, con la instalación de los sistemas coheteriles Mk-41 en Rumanía y Polonia, Washington viola el Tratado para prohibir los cohetes de mediano y corto alcance (menos de 500 kilómetros) en instalaciones terrestres, desde donde pueden lanzar misiles Tomahawk.
Precisamente, los mencionados cohetes alados norteamericanos poseen un alcance de dos mil 500 kilómetros y pueden cubrir con sus golpes a toda la parte europea rusa, advirtió.
El militar se refirió a los recientes ejercicios en ordenadores de Rusia y China, realizados por primera vez, para combatir los efectos del sistema antimisil y prometió su repetición en 2017.