La Habana-.  A pesar de los compromisos vigentes entre los gobiernos de Cuba y Estados Unidos, Washington alienta políticas violatorias de los acuerdos migratorios bilaterales, denuncian hoy las autoridades de la nación caribeña.

Según funcionarios de la Cancillería cubana, el país norteño impulsa programas que, además de poner en peligro la vida de las personas, dinamita los esfuerzos por garantizar una emigración legal, segura y ordenada.

Tras una ronda de conversaciones migratorias entre ambos países realizada la víspera en La Habana, la delegación de la isla hizo énfasis en que no existirán relaciones normales al respecto mientras persistan la política de “Pies Secos-Pies Mojados”, la Ley de Ajuste Cubano y el “Programa de Parole para Profesionales Médicos Cubanos”.

De acuerdo con la directora general de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (Minrex), Josefina Vidal, las acciones de Washington no quedan exclusivamente como un problema bilateral, sino que tienen carácter extraterritorial.

Tal es el caso del programa de parole para médicos, que alienta a profesionales cubanos de la salud a abandonar sus misiones como colaboradores en terceros países para emigrar hacia Estados Unidos.

Esa práctica afecta a los sistemas de atención médica de dichas naciones y no está en correspondencia con el contexto de las relaciones cubano-estadounidenses impulsadas desde finales de 2014.

Por otra parte, las citadas política de “Pies Secos-Pies Mojados” y Ley de Ajuste Cubano conceden a los ciudadanos de la isla caribeña un trato preferencial, único de su tipo en el mundo, que favorece las migraciones ilegales.

Al admitir automáticamente en territorio estadounidense a los cubanos llegados de manera irregular, sin miramientos con las vías y medios empleados, Washington promueve situaciones que pueden conducir a la muerte de individuos, el fraude, la violencia y la trata de personas.

Con el aliento a la comisión de delitos, el Gobierno estadounidense interfiere en la estabilidad de otros países, sobre todo los latinoamericanos, pues sus medidas incitan tanto a los ciudadanos cubanos dentro de la isla como a aquellos que viajaron al exterior de manera legal.

Vidal, quien encabezó la delegación cubana en las conversaciones de este jueves, señaló que Estados Unidos cada vez queda más aislado internacionalmente en cuanto a su política migratoria hacia la isla, tal como sucede en el caso del bloqueo económico, financiero y comercial impuesto desde hace más de medio siglo.

El pasado día 12, el Gobierno cubano ratificó su compromiso con una emigración legal, segura y ordenada, así como con la posibilidad de retornar al país para los ciudadanos que salieron lícitamente del territorio nacional y cumplen con la legislación vigente.

Así lo expresó una nota suscrita por la dirección de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior del Minrex, la cual se difundió en los medios nacionales de prensa a raíz de la deportación desde Ecuador de dos grupos de cubanos los días 9 y 11 del presente mes.

La misma asegura que el traslado se produjo en total concordancia con las garantías procesales establecidas para esos casos y responsabiliza a Washington por la situación creada.

Los referidos deportados viajaron inicialmente de manera legal y cumplieron todos los requisitos establecidos, pero luego desarrollaron periplos irregulares alentados por las políticas migratorias estadounidenses hacia la mayor de las Antillas.

Ante esa situación, el Gobierno cubano reafirmó su firme propósito de evitar que seres humanos indefensos se conviertan en víctimas de traficantes de personas.