Elegante y esplendorosa Violeta

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Por Roberto Mesa Matos | 3 agosto, 2016 |
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la violeta 2MANZANILLO.- Una reluciente y esplendorosa “violeta” cautiva desde hace unos días a los residentes y visitantes a esta costera localidad.

Se trata de un añejo edificio, rescatado de las ruinas y el tiempo, por el interés de las autoridades y el empeño de artesanos, artistas y constructores del sector privado de la ciudad del Golfo para dar vida a la tienda del Fondo de Bienes Culturales La Violeta.

El esfuerzo rindió sobrados frutos, pues hoy la instalación es una de las más relucientes que adornan el entorno del centro histórico de la segunda urbe en importancia de la suroriental provincia de Granma.

Más allá de cualquier motivación, la primera enseñanza evidente en el inmueble es el cuidadoso trabajo de los especialistas, quienes lograron en perfecta armonía belleza y modernidad, sin socavar los valores patrimoniales sin prisas ni pausas.

Feliz por el resultado, Julia Lorente Ávila, directora de la tienda dice que materializaron así un sueño largamente acariciado por la comunidad de creadores manzanilleros, “que instala aquí una nueva modalidad de expresión mediante sus obras, que los clientes podrán apreciar y llevar consigo”.

Lorente Ávila cuenta que cambiaron pisos, muros, redes eléctricas e hidrosanitarias, e hicieron más atractivos los detalles artísticos dentro del local.

“La brigada de constructores laboró además en el segundo nivel, en la fachada y fuimos muy cuidadosos al respetar las regulaciones patrimoniales para la reparación de este inmueble, que compartimos con Artex, para enriquecer las ofertas a la población.”

El joven artista Yanier Carrazana Quintana fue uno de los encargados de embellecer con sus creaciones el interior del establecimiento.

Llegado junto a otros seis compañeros, desde su residencia en el municipio de Guisa, Yanier manifiesta:

“El interior lo decoramos casi todo en madera, y como se nos orientó cuidamos por el exterior el valor patrimonial de un edificio que se integra al casco histórico de la urbe. Los colores que más usamos son el rojo y el blanco.”

“El quehacer demandó mucha paciencia y dedicación, pero cumplimos en solo 45 días”, afirma Carrazana Quintana.

La Violeta abrió más elegante y esplendorosa. Los que se decidan por esa opción podrán llevar a casa un hermoso regalo donde se conjugan el buen gusto y la belleza de las creaciones de los artistas golfeños.

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