La eliminación del campeón defensor Alemania y el avance de un equipo por menos acumulación de tarjetas amarrillas, hecho sin precedentes, entre otras notas sobresalientes, signaron la conclusión de la fase de grupos en la Copa mundial de fútbol Rusia 2018.
Al parecer, la derrota inicial ante México era el preludio del desplome de la potente escuadra teutona, que por más que intentó asegurar uno de los pasajes del segmento F, terminó estrellándose contra el conjunto de Corea del Sur en su tercera presentación.
Así, Joachmin Low y sus elegidos jugaron solo los encuentros preliminares en su llave, para ver frustradas sus intenciones de defender la corona alcanzada en Brasil 2014 y, peor aún, la selección se despidió más temprano de lo esperado de un torneo al que llegó entre las grandes favoritas.
Otros sucesos llamativos también centraron la atención de millones de espectadores en el orbe, como la clasificación de Japón, por encima de Senegal, por el segundo boleto en el apartado H, que finalmente dominó Colombia.
Para acceder a octavos de final, los japoneses jugaron más limpio que sus contendientes, después de concluir igualados en todos los parámetros, incluyendo el duelo particular con empate a dos.
Asimismo, por primera vez los 32 elencos anotaron, al menos, dos goles, y un solo partido de los primeros 48 finalizó sin anotación, el que enfrentó a la dotada Francia con Dinamarca, en el Estadio Olímpico Fisht, de Sochi, este 26 de junio; mientras el número de perforaciones llegó a 122, para un promedio de 2.5 por encuentro.
Con los últimos desafíos de la llave G quedaron definidos los cruces de octavos, al que avanzaron casi todos los favoritos, como Francia, España y Brasil, junto a Croacia y Bélgica, que ofrecieron quizás las demostraciones más convincentes y acaban de presentar sus candidaturas; entretanto, Uruguay fue el único que traspasó la primera etapa sin ver perforada su portería.
Sin embargo, algunos planteles dejaron dudas de cara a los primeros desafíos de muerte súbita, como la inconsistente Argentina, el propio México que -después de la victoria frente Alemania- se vio superada en toda la línea por Suecia, y la Furia roja española, que permitió cinco goles.
De todos modos, a partir de este 30 de junio se auguran batallas campales, como las que deben protagonizar franceses y argentinos en la apertura de los pareos de octavos, que culminará con otro tope atractivo entre colombianos e ingleses.
Aunque el certamen transcurre sin muchas sorpresas, exceptuando el inesperado adiós de los germanos, que por el momento parece suficiente, quedan goles y emociones por vivir hasta el 15 de julio, cuando el monarca levante la copa en el majestuoso Luzhniki, de Moscú.