El fomento de la producción de alimento alternativo es clave en el propósito de aumentar la cría de cerdos desde las fincas, módulos pecuarios y Unidades empresariales de base (UEB) pertenecientes a la Empresa porcina Granma.
De ahí que se persiga aprovechar los volúmenes de subproductos de las industrias azucarera, láctea y pesquera, además rescatar el denominado cerdo de capa oscura con la incorporación de 400 hembras de la raza para lo cual proyectan la apertura de una instalación destinada a su reproducción.
Yusleidys Pérez Prats, directora de la entidad, informó que las medidas responden a la necesidad de cosechar en tierras propias las materias primas para el alimento animal y no depender de piensos importados.
Pérez Prats explicó que el déficit en los productos provoca severas afectaciones desde el año anterior y se agudiza en el 2020 con una reducción del 52 por ciento del plan inicial.
Señaló que el reajuste significa solo la producción de cerca de seis mil toneladas de carne de cerdo, muy por debajo de las necesidades de la población granmense, que constituye la cuarta más grande del país.
¨Por eso hoy estamos hablando de cuánto más podemos aportar y el objetivo de que los 716 productores con convenios porcinos cuenten con la tierra para producir el alimento que demanda el movimiento de rebaño¨.
Argumentó que ahora los porcinocultores tendrán, en buena medida, que autoabastecerse porque estatalmente no puede entregársele el 70 por ciento de la comida como consecuencia de la crisis mundial, impactada por la pandemia de la Covid-19 y el férreo bloqueo económico, comercial y financiero del Gobierno de los Estados Unidos.
A favor de la recuperación de la empresa, destaca la puesta en marcha de la UEB integral de cría 26 de Julio, ubicada en la zona de Cujabo, en Yara, la que acoge 512 hembras gestadas con la aspiración de completar los mil 500 ejemplares.
Yandis Álvarez Ramos, director de la UEB, subrayó que laboran en la plantación de 10 hectáreas de cultivos varios en los alrededores del centro con la participación de los trabajadores y el empleo de la tracción animal.
Maíz, frijol, pepino, calabaza y tomate han acopiado y fomentan la siembra de yuca, esta última para que no falle la alimentación animal, indicó.
El joven médico veterinario manifestó optimismo por los resultados hasta la fecha, con una efectividad económica del 95 por ciento que garantiza la cría, partos y productividad.
Mientras, en la UEB Pedregales, de Bayamo con una creciente actividad reproductiva, meritoria trayectoria en la inseminación artificial y cosecha de frutos en el autoconsumo, construyen naves rústicas, para el módulo pecuario, en las que multiplicarán la crianza de ovejos, conejos y gallinas.
Alejando Marcos Borges Briñones, al frente de la unidad, dijo que sobre cumplen el plan, al cierre de mayo, y que venderán, este año, 18 mil 745 precebas con un peso de siete kilogramos a los productores.
PARA MANTENER LA PRODUCCIÓN
A un kilómetro y medio del poblado de Santa Rita, en Jiguaní, está la finca integral El Progreso la que tiene como objeto social la producción porcina.
Madelaine Liranzo Garlobo y Michel Heredia Aguilar son una pareja campesina que han logrado diversificar 20,26 hectáreas en su condición de usufructuarios asociados a la Cooperativa de Créditos y Servicios Tomás Díaz.
Ellos cuentan actualmente con 800 puercos en ceba y en cada convenio exceden la entrega de carne con un promedio que rebasa los 93 kilogramos en el peso por animal.
¨Nosotros no nos vamos a parar y lo que necesitamos es tierra, un pedacito por ahí, lo más cerca posible para sembrar la comida sobre todo con el cultivo de yuca¨.
Así de rotunda fue la respuesta que le escuché a la recia mujer, junto a la afirmación del esposo, quien siempre le ha acompañado en el cumplimiento de la tarea, máxime cuando de producir para el pueblo se trata.