Para Yosvanis García Antúnez la vida cambió cuando devengó siete mil pesos de salario, en un mes, por los resultados en la finca platanera.
“Cultiva, fertiliza, riega y realiza labores en la limpia, deshoje y deshije de la plantación, además, de custodiar las cuatro hectáreas a la que está vinculado, sin escatimar tiempo” , dijo el destacado obrero, quien se siente feliz porque sus esfuerzos y sentido de pertenencia se ven premiados.
Desde finales de 2013 trabaja con el empeño de aumentar la producción de plátano burro, conocido como fongo, que supera los rendimientos de 70 toneladas por hectárea y aporta semillas de alta calidad.
“Me satisface estar aquí, aunque algunos dijeron que estaba loco, por las condiciones y el salario de entonces, y la verdad, nunca pensé ganar esa cantidad de dinero. Ahora mi familia me apoya y está mejor atendida”.
El ejemplo por esos beneficios se extiende a otros trabajadores de la Empresa agropecuaria Jiguaní, en el municipio homónimo de Granma, con el crecimiento económico por la vía de la productividad, experimentado durante el último año.
Ese colectivo excede los volúmenes de viandas, hortalizas, granos y frutales, y a finales de este año deberá registrar incrementos, en comparación con la etapa anterior. Otro de los surtidos que favorecerá los ingresos es la comercialización del carbón vegetal, un rubro exportable de alta demanda y bien remunerado.
Sobresalen en sus predios sembrados con diferentes cultivos, áreas bajo riego con novedosas máquinas eléctricas de pivote central, lo cual permitirá dejar atrás las reiteradas críticas por su deficiente explotación.
Exceden lo contratado en la entrega de leche con destino a la Industria Láctea y la producción total del valioso alimento.
También registra favorable comportamiento en los indicadores económicos por las ventas, tanto en pesos cubanos como en convertibles, reflejo de recuperación financiera y gradual mejoría del salario.
Diómedes Guevara Pérez, director general de la institución, explicó que estos resultados se asocian, entre otros, a la puesta en vigor de la Resolución 17 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, hoy reemplazada por la seis, que avala la cuantía a otorgar con varios salarios medios mensuales de lo percibido.
“En ese sentido, considero que es una de las principales misiones de la empresa estatal socialista para dar buena atención a sus trabajadores, lo que estamos cumpliendo.
La entidad ha encontrado el rumbo. “El esfuerzo ha sido enorme, pero hemos recuperado este polo productivo que estaba perdido”, acotó.
Mientras, Luis Leyva Reyes, director de la UEB de Servicios Técnicos Integrales, destacó la estabilidad en la fuerza laboral a partir de la implementación de estimulantes sistemas de pago.
“La atención al hombre es fundamental, indicó, pues los trabajadores tienen garantizados alimentación de calidad, implementos, ropa, zapatos, entre otros recursos”.
De acuerdo con Marisbel Rivero, obrera, la tarea principal es producir alimentos para el pueblo y, aunque dura, está motivada porque gana según el resultado en el área de la máquina de riego.
La entidad pretende convertirse en referente nacional de eficiencia, lo cual incluye el acopio, comercialización y prestación de servicios con la introducción de tecnología, y la aplicación de la ciencia y la técnica.
Asimismo, potencia el funcionamiento de la remodelada minindustria para el procesamiento de frutas y otros vegetales, de cuyas líneas se obtienen siropes, cremas, mermeladas, néctares, encurtidos, vinagres y otros productos de alta aceptación.
Incluye cuatro puntos de venta, uno de estos, la hermosa instalación denominada Río de Oro, situada en el centro del municipio. Además, existe la intención de extender la oferta a otros territorios cercanos, como a Santa Rita y a Bayamo.
Misleydis González, al frente de la planta, dijo que la experiencia es positiva, con notable rentabilidad e ingresos que rebasan los 300 mil pesos a la Empresa y los mil pesos per cápita a los obreros, por concepto de salario en un mes.
Perteneciente al Grupo empresarial agrícola del Ministerio de la Agricultura, la Empresa tiene su sede en El Cucán, junto a la Carretera Central, vía a Santiago de Cuba, y agrupa una unidad de regulación y control, cuatro unidades empresariales de base, 11 cooperativas de créditos y servicios, y tres unidades básicas de producción cooperativa.
Tras muchos años sin plantar cítricos en estos dominios jiguaniseros, con buenos suelos, ya se alistan las primeras áreas para rescatar ese cultivo hasta llegar a unas 100 hectáreas, según informó Guevara Pérez.
Nuevas maquinarias para la siembra, riego, cosecha y recuperación del bombeo de agua han permitido un mayor aprovechamiento de la tierra, por lo que son crecientes las expectativas y proyecciones.
Así la Empresa agropecuaria Jiguaní da pasos con acciones que auguran, en poco tiempo, saldar los gastos de la inversión, para bien de la economía territorial.