Recordó que además de las llamadas áreas comunes (cocinas, recepciones) es preciso acabar la edificación de los alojamientos para los guerrilleros -a la espera de su reincorporación a la vida civil-.
Las demoras en la habilitación de los lugares donde permanecerán los miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) para desarmarse complicó esta primera y decisiva etapa de la implementación de los acuerdos encaminados a terminar el largo conflicto bélico con ese grupo.
Durante una reunión celebrada en Cartagena de Indias el pasado mes, el Gobierno prometió dejar listos la totalidad de esos sitios (26 dentro de 14 departamentos) antes de que concluya abril.
En algunos parajes podrán terminar las áreas comunes, pero siguen inconclusos los campamentos para los hombres y mujeres de las FARC-EP, en otros no hay agua o sistemas de drenaje, tenemos dificultades también con las vías de acceso en ciertos escenarios, amplió el dirigente de esa organización tras comentar que la prioridad ahora es hallar soluciones para impulsar tales faenas.
Es algo que deberá definirse de conjunto con el Ejecutivo, aclaró Márquez quien dejó entrever que no renuncian a la idea de convertir al menos varios de esos espacios en una suerte de pueblitos de paz.
Durante el diálogo con Prensa Latina, el vocero de las FARC-EP confirmó que están discutiendo ya las tesis del nuevo partido político, el cual deberá conformarse una vez culminado el desarme.
Nuestro próximo congreso se realizará en las primeras semanas de agosto, allí fundaremos el Partido, precisó.
El 24 de noviembre el presidente Juan Manuel Santos y el máximo líder de las FARC-EP, Timoleón Jiménez, suscribieron el tratado definitivo con el que se comprometieron a poner punto final a los enfrentamientos y hostilidades.
Ese documento contempla entre sus medidas la instauración del cese el fuego bilateral, vigente desde agosto, así como la dejación de armas con supervisión de una misión de las Naciones Unidas.
La creación de la Comisión de la Verdad a fin de esclarecer lo acontecido a lo largo de más de medio siglo de confrontación es otra de las iniciativas previstas, junto a la activación de una unidad especial que estará encargada de buscar a millares de desaparecidos (suman casi 60 mil).
Es preciso ahora un consenso similar con el rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN) en busca de lo que políticos y analistas han llamado una paz completa para Colombia.