El embajador del país asiático, Masaru Watanabe, expresó a Prensa Latina que ese donativo de implementos deportivos ayudará a fortalecer los vínculos entre las federaciones de ese deporte en ambos países, y es un paso más hacia adelante en el impulso a las relaciones entre Cuba y Japón.
Watanabe señaló que espera que esta entrega no solamente sirva para mejorar el nivel del kendo en la isla caribeña, sino también como un puente espiritual y ‘de corazón’ entre los dos pueblos, en aras del entendimiento mutuo.
El kendo es una disciplina que se destaca por el uso y manejo del sable de bambú, y la misma es practicada por alrededor de dos millones de japoneses, incluyendo policías y alumnos de nivel secundario, para el entrenamiento físico y también espiritual de sus aprendices.
Actualmente, cerca de un centenar de cubanos en siete escuelas o dojos practican kendo, y la mayoría de ellos no contaban hasta ahora con el equipamiento necesario, por lo cual debian acudir a la inventiva y la creatividad mediante diversos materiales.
Antonio Becali, presidente del Instituto Cubano de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder), recordó durante la ceremonia de entrega de esos artículos que las relaciones de Cuba y Japón se remontan a más de 400 años atrás, cuando el samurai Hasekura Rokuemon Tsunenaga visitó la isla en 1614 en misión diplomática.
Las grandes artes marciales japonesas, entre ellas el judo, el kárate, el kendo, el kyudo, el jiu-jitsu en sus diferentes manifestaciones, y el sumo, han sido practicadas en Cuba, como una de las formas de unión entre los dos pueblos, acotó el federativo del deporte en la isla.
Durante la ceremonia, un grupo de practicantes cubanos de kendo, receptores de los donativos, ofrecieron demostraciones de esta tradicional especialidad.
Esta donación japonesa es muy importante para los expertos cubanos de kendo, pues poder usar toda esa indumentaria especial, que protege cabeza, pecho, manos y torso, ayudará a entrenar mejor y con mayor fuerza este arte marcial en Cuba, significó también Nubia Bregado, al frente del Grupo Nacional de Artes Marciales.