Aunque alejada de sus mejores registros personales (82, 100 y 178 kilos), como era de suponer, la pesista granmense Ludia Montero Ramos (49 kg) ganó medalla de bronce, este sábado, durante la jornada inicial de la I Copa panamericana online.
“He entrenado en mi casa, pero sin las comodidades y sin las condiciones necesarias”, apuntó, aún encarama sobre la plataforma que se improvisó en Bayamo, luego de seis ejecuciones válidas y terminar tercera en las tres modalidades, con 65 kilos en arranque y 85 en envión, para un total de 150.
La medallista de plata en el Campeonato mundial de Pattaya (Tailandia), en el 2019, significó que se sintió mejor en el primero de los ejercicios, “el envión fue más difícil, es más de fuerza”.
Montero encontró en la peruana Fiorella Francesca Cueva Uribe (70, 95 y 165) y en la ecuatoriana Mercedes Campoverde Almeida (72, 92 y 164) a sus rivales más difíciles; ellas se repartieron el botín dorado en la división, que solo inscribió a cuatro competidoras.
A partir del lunes, cuando inicie la tercera fase de recuperación posCOVID-19, planea entrenarse en un gimnasio de su natal Río Cauto, “hasta que regrese el día 15 de agosto a La Habana, para comenzar de lleno en la preparación rumbo a los Juegos olímpicos de Tokio”, explicó.
“Para clasificar necesito superar mis mejores marcas”, expresó con seguridad la joven de 21 años de edad, sobre el difícil reto que representa conseguir pasaje para la justa asiática.
PLATA PARA MELISA
La bayamesa Melisa Aguilera Peña también se mostró en deuda con el entrenamiento, pero en la convocatoria de tres atletas escoltó a la ecuatoriana Neisi Dajomes Barrera (86, 106 y 192), que dominó a su antojo la categoría de 76 kg.
Aunque Aguilera falló en su tercer intento del arranque, con 80 kilos sobre la palanqueta, los 75 kilos que había levantado sirvieron para arrancar en el segundo lugar, posición que nunca puso en peligro la paraguaya María Paz Ayala (70, 95 y 165).
Melisa, que también se encuentra en el proceso clasificatorio olímpico, realizó con limpieza las tres ejecuciones en el envión, hasta llevarlo a 100 kilos y sumar un biatlón de 175, para completar la faena de las forzudas granmenses.
EL OTRO DESAFÍO
Más allá del resultado competitivo de Ludia y Melisa, la justa significó un desafío para sus organizadores en Granma, ante las limitaciones de conectividad y tecnología para el uso de internet en Cuba.
Así lo reconoció el ingeniero informático Gustavo Viamonte Veloz, administrador de redes en la Dirección provincial de deportes, “felizmente todo salió bien”, apuntó aliviado.
“Era imposible utilizar la plataforma de Zoom, que domina Estados Unidos; entonces, la Federación panamericana nos ayudó, facilitando un enlace con Spyke para trasmitir”, detalló el especialista.