Tras haberse convertido en el 2013, en el primer municipio de la suroriental provincia de Granma en poner en marcha su Programa de Desarrollo Integral, importantes mejoras y económicas han impactado en el municipio de Río Cauto.

El programa, que como se conoce es una suerte de diseño, de todos los presupuestos que deben elevar el desarrollo de una localidad en cada una de sus esferas, permite la planificación de las inversiones necesarias y sus etapas de ejecución.

Mediante esa proyección, iniciativas económicas de diversa índole favorecen el desarrollo de localidades y comunidades, aportando bienes, insumos y servicios necesarios para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

En el 2015, se advirtieron en Río Cauto los primeros impactos de dicha estrategia, etapa en la que, por ejemplo, se instaló un sistema de nueva generación en el centro telefónico que permitió una capacidad de 386 nuevos servicios. La densidad telefónica fija por cada 100 habitantes antes de la instalación de la nueva central era de 5.18 y con esta aumenta a 6.65, la telefonía pública es de 4.81 por cada 100 habitantes, superior a los indicadores provinciales.

También en ese lapso se realizaron 13 mejoras eléctricas en circuitos secundarios con beneficio para dos mil 400 habitantes en los barrios de Guamo, Doce y Medio, Flora, El Mango, Cristino Naranjo, Miradero, Jesús Menéndez, El 21, El Salado y Los Guayitos.

Unas 425 luminarias de alumbrado público fueron rehabilitadas, y se electrificaron siete asentamientos poblacionales, para llevar el servicio a más de mil 300 pobladores.

En el 2016 se realizó un cambio tecnológico en la central de Grito de Yara, central de última generación, se instalaron 59 nuevos servicios y 4 teléfonos públicos, se remodeló la oficina comercial de la cabecera municipal con una sala de navegación de internet, y se instaló un sitio WIFI

La mitigación de focos contaminantes, rehabilitación de la red de distribución de agua, conservación y rehabilitación de viviendas y edificios multifamiliares, la construcción de cientos de nuevas moradas, adquisición de equipamiento para brigadas de mantenimiento a viales del programa arrocero y de nuevos ómnibus para el transporte de pasajeros, se incluyen entre los impactos del programa.

En varios municipios del país y por supuesto de Granma se implementan también acciones para lograr las sinergias ineludibles en los procesos de creación de actividades productivas sustentables, y los programas de marra constituyen un instrumento imprescindible para que los gobiernos de los municipios visualicen los objetivos añorados y las acciones a emprender para alcanzarlos.