Buey Arriba, Granma, – Los pobladores de las zonas montañosas de la provincia Granma, territorio en Fase de Alarma Ciclónica, implementan medidas para minimizar los posibles daños del huracán Irma, categoría cinco en la escala Saffir-Simpson.
Juan Fernández, productor de una finca de cultivos varios en el municipio montañoso de Buey Arriba, explicó a la ACN que ha recogido algunos alimentos, como plátanos y hortalizas, para evitar las pérdidas si ocurren intensas lluvias, y los animales fueron llevados a lugares altos donde se mantendrán protegidos.
Agregó que en ese montañoso municipio, uno de los mayores productores de café en la provincia, se agilizó en los últimos días la recogida del grano maduro y se trasladó a sitios seguros en las capitales municipales.
Esperanza Ríos, de 65 años de edad, dijo que es necesario extremar las medidas porque el huracán Irma es muy potente, con ese objetivo en su vivienda protegieron el techo con sacos de arena, y guardaron las pertenencias y los equipos electrodomésticos en una casa cercana.
También, con la bondad propia de la gente de campo, Alcides Castillo y su esposa, tienen listo su hogar para recibir a más de 20 familiares y vecinos, quienes ante la amenaza de cualquier evento hidrometeorológico buscan refugio allí, por ser una vivienda en buen estado constructivo.
Los recursos de algunas escuelas pertenecientes al Plan Turquino fueron guardados en edificaciones cercanas y casas de vecinos, comentó a la ACN Caridad León, subdirectora general de Educación en la provincia.
En el oriental territorio los pobladores adquieren productos de primera necesidad como alimentos, velas y medicinas para estar preparados ante la amenaza del huracán Irma, y se mantienen informados sobre su trayectoria a través de los medios de comunicación.