MANZANILLO.- Los camaroneros de esta ciudad oriental de la provincia cubana de Granma iniciaron la tarde de este miércoles las faenas extractivas del crustáceo, luego del levante de veda de la especie.
Cinco embarcaciones y una enviada integran la flotilla encargada de extraer de las aguas del Golfo de Guacanayabo las 50 toneladas previstas hasta el mes de junio cuando se decrete el fin la pesquería.
El acto de inicio de la contienda se convirtió en una fiesta de júbilo colectivo pues, precisamente, el camarón es el producto estrella de la Empresa Pesquera Industrial de Granma (EPIGRAM), con sede en Manzanillo.
Alfredo Castañeda Vivero, pescador de amplia experiencia “camaronera” refrendó en nombre de sus colegas que “los patrones se compromenten en la nueva campaña a cumplir con los planes productivos, preservando los recursos pesqueros y lograr los más altos estándares de calidad para cumplir las exigencias del mercado internacional.”
Hasta el mes de junio, “los hombres de sol y salitre” de Manzanillo laborarán en las áreas pesqueras que abarcan desde esta ciudad hasta Niquero, así como desde la Ensenada a Santa Cruz y en las aguas del Golfo de Guacanayabo.
“Trabajaremos con decisión e inteligencia, y la convicción de que no existe otra opción que el cumplimiento”, aseguró Juan Montero Reyes, director de la Unidad Extractiva de EPIGRAM y agregó que “laboraremos con sentido de pertenencia, del ahorro y el honor empeñados en la misión que tenemos por delante.”
La línea del camarón es una de las más modernas y novedosas de EPIGRAM al disponer para el procesamiento del crustáceo de un laboratorio catalogado como de primer mundo, desde donde sale las producciones para la exportación, el mercado interno en divisas, y el comercio en la oriental provincia cubana de Grama.