Con una suerte de expoventa de más de un centenar de platos diversos, los gastronómicos bayameses mostraron recientemente el verdadero alcance de la resolución 99, una novedosa herramienta que, implementada el pasado año por la Ministra del Comercio Interior en el país, apoya la autogestión de las entidades del sector para adquirir suministros que estatalmente no les pueden ser garantizados en estos tiempos complejos.
Aprobada como ya se ha informado, en una etapa de desabastecimientos, tiene precisamente como objetivo, el flexibilizar las regulaciones para la compra de productos alimenticios, frescos o elaborados y otros, por las empresas, unidades empresariales de base, unidades básicas y establecimientos del comercio interior, subordinadas a los órganos locales del Poder Popular, con el fin de que estas incrementen las ofertas y brinden servicios de calidad.
DE LO ÚTIL A LO TRADICIONAL
Aunque el camino que deben y pueden recorrer las administraciones de las entidades gastronómicas apenas comienza, la citada expoventa, presentada en el conocido como Parque de la Emulación, en la capital granmense, demostró que la herramienta no solo es útil como sostén material del servicio, sino que mueve la diversidad y por sí misma se encuentra con la cocina tradicional cubana, un elemento que le aporta autenticidad a los resultados.
Tamales, revuelto de maíz con carne, frituras, empanadillas, tacos, jugos de frutas naturales, pescados frescos de agua dulce, ajiacos, limonada, los llamados dulces caseros como natillas, frutas beneficiadas y otros muchos platos tradicionales de la región volverán por esta vía a la mesa de cafeterías y restaurantes, con atractiva presencia y un ajuste de precios un tanto diferenciados pero un poco más accesibles ahora al salario de los trabajadores.
PUNTO DE PARTIDA
Ramón Rodríguez Tamayo, coordinador de programas y objetivos para la atención a los servicios en el Gobierno municipal de Bayamo, destacó en la ocasión que esta suerte de ejercicio gastronómico llegó para demostrar que se pueden hacer cosas sin que el Estado intervenga en la entrega de insumos
“Es un punto de partida para lo que puede hacerse, porque la realidad es que la empresa cárnica, afectada por la entrega de suministros por parte de la Agricultura, solo está destinando a la gastronomía cabezas y huesos de cerdos, pues la poca disponibilidad de carne está dirigida al procesamiento industrial, para cumplir con los ciclos de entrega a la canasta familiar.”
Explicó Rodríguez Tamayo, que las administraciones de las entidades ahora cuentan con un monto de dinero superior (iniciaron con 500 pesos y ahora les es entrega dos mil 500) para comprar a los productores individuales, cerdos, gallinas, conejos, ovejos, viandas, ensaladas, y todo lo que sean capaces de gestionar, en una tarea que requiere voluntad, esfuerzo, porque implica movimiento, mucha búsqueda y contratación oportuna, y también un examen necesario de cuánto se invierte en cada compra y los ingresos que aporta.
Por el impacto de esta demostración, Calixto Santiesteban Ávila, primer secretario del Partido en Bayamo, propuso repetir de este tipo de ejercicio en varios puntos de la demarcación, para que la población conozca de la gestión que se hace, cuyo objetivo esencial es lograr estabilizar la presencia de esas elaboraciones en las unidades gastronómicas.
“Si ellos gestionan de la manera que han mostrado aquí, la gastronomía crecerá solo con la resolución 99, con gestiones propias y productos de estación, una demostración que merece reconocimiento y al mismo tiempo, convocatoria a hacerlo de manera sostenida, para que la gastronomía de Bayamo mantenga su tradicional buena presencia”.