Siempre será la casa de todos. De todos los que quieran saber, soñar, alcanzar metas en el camino de la superación profesional y el conocimiento.
Esta historia viene a nutrir la casa, por aquella puerta enorme y longeva se entraba antes a un salón mágico con anaqueles repletos de libros, que es como decir de naves para viajar al Universo.
Es un inmueble peculiar, levantado en el siglo XX pero su corazón guarda las cenizas heroicas del Bayamo de enero de 1869. Una puerta llena de accidentes como un mapa del tiempo, paredes robustas enladrilladas en barro rojo, techumbre ensamblada de madera grillosa y firme, muebles y fotos de otro tiempo, tan cercano y lejano a la vez, nos recuerdan esa época gloriosa en que la generación patriótica todo lo dió, todo: vida y sustentos, familia y esfuerzos a cambio de libertad y dignidad.
La Biblioteca Provincial 1868 ubicada en Bayamo cumple este 12 de julio 56 años de fundada, y sigue siendo hermosa, mágica, sigue dando y forjando mentes, aportando a la Cultura, las ciencias, la sociedad.
Erigida en el terreno que perteneciera a la casa natal del patriota abogado Francisco Vicente Aguilera, tiene una sala dedicada al héroe bayamés en lo que fuera una habitación de la colonial manción. Los descendientes de Aguilera donaron el terreno para beneficio público de los bayameses y fue construida, luego de las dos primeras décadas del siglo XX, caracterizadas por la inercia y el marasmo constructivo en Bayamo, un elegante edificio que sirvió como sede de la primera Escuela Técnica Industrial, la que luego será trasladada al este de la ciudad.
Apenas cinco años del triunfo de la Revolución de enero y ya Bayamo acoge por la pujanza de su pueblo y la voluntad gubernamental de abrir bibliotecas en el país, la apertura de la casa de los libros, hoy mucho más grande y espaciosa, iluminada y con proyectos abarcadores hacia el cumplimiento de la misión institucional y el compromiso con la educación, formación y capacitación de sus públicos.
Las bibliotecas son unas de las primeras instituciones culturales, junto a galerías y librerías, en prestar servicios en la etapa post covid19. Y lo hacen con restricciones en la cantidad de personas pero no en prestaciones.
Bárbara Weeden Estrada, directora del sistema de bibliotecas en Granma, explica que continúan con los préstamos internos y externos, la lectura de publicaciones diarias, el asesoramiento a estudiantes en tareas extraclases y se preparan para acompañar a estos y sus familias en el gran reto que será la apertura del curso escolar en septiembre, donde cerrará el período 2019-2020 y abrirá a su vez el curso correspondiente al actual año.
Llegar a sus lectores habituales en los barrios, proponer lecturas e incentivar las búsquedas bibliográficas a través de concursos y otras actividades, suponen estar siempre en constante desafío a la desesperanza y el hastío. Las y los bibliotecarios deben ser hoy personas muy preparadas, capaces de sugerir, de orientar lecturas y búsquedas.
En la biblioteca de Bayamo puedes tener la suerte de encontrarte con extraordinarios escritores e intelectuales asiduos al inmueble, o disfrutar de las peñas que conducen el poeta Abel Guerrero o el historiador Ludín Fonseca.
También acercarte a exposición interesantes, descubrir textos raros y valiosos por su antigüedad y contenido exclusivo. Es una gran casa abierta para todos.