Una nueva convocatoria a darle prioridad en el entramado económico actual del país, a la correcta planificación y ejecución del presupuesto, hizo en Bayamo, Salvador Valdés Mesa, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba.

Al término de la primera jornada de dos en que transcurrió una visita ministerial a la provincia de Granma, encabezada por el presidente cubano Miguel Díaz Canel Bermúdez, el arriba citado dirigente intercambió con medios de prensa sobre esos principios ineludibles para continuar avanzando en la dinamización económica y social del país.

Valdés Mesa valoró que en este territorio hay un buen trabajo en el completamiento de las plantillas de los organismos globales, que son determinantes y se convierten en un instrumento del Gobierno para poder controlar y administrar el presupuesto, pero debe insistirse en la solución del problema que nacionalmente representa la fluctuación de la fuerza de trabajo.

Tenemos, comentó, fallas en la planificación en el sistema empresarial, en la confección de los planes, los cuales son tensos, en tanto los indicadores no tienen una adecuada correlación, entiéndase salario -productividad, las utilidades, los costos, los límites de gastos y salarios, y el valor agregado que se genera.

El intercambio sobre esos temas a propósito de esta visita, señaló, busca resolverlos hacia el futuro, al tiempo de analizar las proyecciones del plan de 2019.

Agregó que el problema lo tenemos, también, en la administración del presupuesto, que se hace y debe de ejecutarse porque repercute en más beneficios sociales para la población, y cuando hay una  inejecución, el barrio, una zona, un municipio, dejan de recibir un servicio para el cual está destinado determinado recurso.

Llamó la atención, asimismo, sobre la urgencia de cambiar en el país lo relacionado con la cadena de impagos, los cuales traban a las empresas en su funcionamiento, porque  estas producen, venden, no cobran y se quedan sin capital para seguir produciendo y para poder pagar el salario de los trabajadores.

Concedió particular significación, en otro orden de cosas, a cuanto se hace para responder a los planteamientos hechos por los electores en los procesos de rendición de cuenta de los delegados y, también, en los despachos con estos últimos.

“Tenemos que, dijo, aun teniendo en cuenta las limitaciones reales, que no nos permiten solucionar todo porque  ello implica realizar inversiones, hacer el esfuerzo para en lugar de respuestas, dar soluciones que  favorezcan a la sociedad, y que esta se beneficie cada vez más con servicios vitales.”