Por la seguridad y protección de los adultos mayores

Share Button
Por María Valerino San Pedro | 26 marzo, 2020 |
0
Foto Rafael Martínez Arias.

Para Juan Guillermo estos días reafirman su criterio de que en esta sociedad él, una persona de 85 años que no tiene vivienda propia, es un privilegiado, por ser uno de los 124 longevos residentes en el hogar de ancianos Lidia Doce, de Bayamo, quienes reciben una atención diferenciada y un chequeo absoluto de salud.

Todas las actividades que allí se realizan se hacen ahora con intencionalidad en las medidas higiénico sanitarias y de pesquisas ante el azote mundial de la pandemia del nuevo coronavirus Covid-19.

El Doctor Liben Estrada Flores, director de la institución, dice a la prensa que cuentan con el personal capacitado, hacen evolución diaria de los ancianos con pase de visita con frecuencia matutina y vespertina, que prevé la posible aparición de enfermedades respiratorias, y cuando se identifican son aislados, con tratamiento especial.

“Desde el punto de vista de control epidemiológico que tenemos aquí –explica- se ha restringido el sistema de pases y de visitas familiares, y comprobamos el cumplimiento diario de las medidas orientadas.

“Además, a los ancianos residentes y de servicio diurno, que suman 47, los mantenemos informados sobre la enfermedad, sus características y qué hacer para evitarla.

“Se fortalece la vigilancia clínica y pesquisa activa de síntomas respiratorios así como el control de foco oportuno, que contribuya a la no diseminación del virus. Se incrementar la vigilancia por el personal de enfermería a los pacientes frágiles o vulnerables; dejando la evidencia en la historia clínica en cada turno de trabajo.

Al adulto mayor con la edad le disminuye la capacidad inmunológica, según afirman fuentes consultadas en Internet, y muchas veces se afectan con enfermedades cardiovasculares, respiratorias, la diabetes y la hipertensión arterial, justamente las que más se complican con el nuevo coronavirus, por ello ese segmento poblacional es el más vulnerable.

En Granma existen 16 casas de abuelos, ocho hogares de ancianos, un Centro Médico Sicopedagógico y una sala de Geriatría con 20 camas en el hospital provincial Celia Sánchez, de Manzanillo.

MEDIDAS EMERGENTES

La Doctora Nancy Lourdes Martínez Garcés, Jefa de sección del Departamento Adulto Mayor, Asistencia Social, Discapacidad y Salud Mental y Adiciones en la Dirección provincial de Salud, Granma, informa sobre las medidas emergentes propuestas para la protección a los longevos ante la amenaza del nuevo coronavirus.

“La población de Granma es de 817 mil 951 habitantes, de ellos son adultos mayores 155 mil 967 para un envejecimiento poblacional del

19,2 por ciento, un tanto por debajo de la media nacional que es de 20,2, aunque los municipios de Jiguaní y Manzanillo, la sobrepasan, con el 21 por ciento.

“En la Atención primaria se realiza pesquisa activa a todos los adultos mayores en la comunidad y diferenciada a los ancianos solos y casos sociales, por el médico y enfermera de la familia, además se informa a los familiares de estos sobre la forma de prevenir las Infecciones respiratorias.

“Los círculos de abuelos continúan activos, pero bajo la premisa de mantener dos metros de distancia a la hora de practicar los ejercicios, y no participar si se tienen manifestaciones respiratorias. Por su parte, las cátedras del adulto mayor se mantienen suspendidas de forma presencial hasta el restablecimiento de la normalidad.

“La capacitación a trabajadores y ancianos mediante actividades de promoción de salud, la actualización del panorama internacional y nacional de la pandemia y extremar las medidas de higiene, resultan acciones cotidianas en las casas de abuelos”.

En relación con los hogares de ancianos, centros médicos sicopedagógicos y hospitales siquiátricos asegura, además de las medidas señaladas anteriormente, se mantienen los aislamientos en las salas de cuidados sub agudos de los pacientes sospechosos o enfermos, hasta su traslado en el transporte sanitario asignado.

Igualmente enumeró entre las medidas los recorridos diarios, con refuerzo en el horario de la noche por personal de guardia administrativa; la realización sin excusa ni pretexto de las medidas de higiene con el lavado de las manos con soluciones de agua y jabón e hipoclorito de sodio, y el uso del nasobuco por trabajadores y pacientes que lo requieran

Se intensifican las medidas de prevención para que estas instituciones continúen siendo un sitio de seguridad y protección de ese segmento poblacional granmense.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *