A plena capacidad de funcionamiento inició este 2019, la industria del mármol Manuel Hernández Osorio, enclavada cerca del poblado de Santa Rita, en el municipio de Jiguaní, provincia de Granma.
Tener garantizada la materia prima, trabajadores laboriosos y equipos en buen estado técnico, permite al director, ingeniero José Miguel Rodríguez Gómez, augurar que este año la entidad iguale, e incluso supere, lo hecho en el anterior, en el que el valor de lo producido superó los 11 millones de pesos.
Dicha industria elabora mármoles en planchas y losas, que tienen dos destinos, uno es el taller de artesanía y piezas especiales Pepín Vázquez, para hacer encimeras y tabicas, y otras piezas especiales para hoteles.
“Nuestro plan de producción para este año ronda los 140 mil metros cuadrados de mármoles elaborados, de ellos unos 10 mil metros cuadrados son para la exportación, que pueden ser en losas o planchas”, expone Rodríguez Gómez.
La referida industria nació en 1986, con la denominación de combinado del mármol y el nombre del bravo combatiente jiguanicero del Ejército Rebelde, caído en Bolivia donde formó parte de la guerrilla internacionalista de Ernesto Guevara de la Serna (Che).
A los equipos entonces instalados se les añadieron, en 2013 y 2018, dos líneas de procesamiento automatizado de planchas, compuestas por dos telares, dos hornos, dos pulidoras y fresas, que humanizan el trabajo y aumentan la productividad.
Al respecto, José Miguel ilustra: “el telar es un equipo que tiene 50 cuchillas y saca de los bloques (de mármol), en un lapso de 10 a 12 horas, 49 planchas, que son llevadas al área de calibrado, donde una máquina les da semiterminación.
“De ahí pasan al área de reforzamiento, se les coloca una malla de vidrio con resina epóxica y entran a un horno que entrega, cada seis minutos, una plancha lista para la producción. Antes ese paso (hornear) se hacía al sol y duraba 24 horas”.
La industria del mármol Manuel Hernández Osorio tiene 87 trabajadores -de ellos tres son mujeres-, organizados en dos turnos, cuyo salario está vinculado a la producción y promedió en diciembre último, mil 600 pesos.
Es objetivo de esa fuerza laboral, “seguir dándole respuesta a las demandas de las inversiones que realiza el país en turismo y reparación de hospitales de La Habana, Villa Clara, Cienfuegos, Holguín y Las Tunas”, asegura José Miguel Rodríguez Gómez.