“Nací en el poblado de Los Guineos, Veguitas, tengo 53 años de edad y me inicié como compositor a los 21”,así testifica el pintor de autos y rotulista Luis Márquez Fonseca, uno de los compositores granmenses más prolífico de la armonía popular bailable en el territorio.
“Hubiera querido estudiar música pero no tuve esa posibilidad y si apareciera no la despreciaría, lo que hago surgen en la marcha del camino, me salen del corazón, como lo que escribí durante la recién finalizada Serie Nacional de Béisbol, en la que el equipo Granma se coronó campeón”.
CUIDÁO CON LOS ALAZANES
“Le presenté el tema a Luisito Bonet Tamayo, director de Yakaré, de Bayamo, enseguida lo montó y cada vez que jugaban los nuestros, la radio y tv nacionales lo promocionaban.
“Fue mi regalo a los tricampeones, el apoyo anímico que necesitaba la tropa de Carlos Martí, que nuevamente demostró su grandeza”.
VARIABLES MELÓDICAS
“Estoy atento a las historias callejeras que la gente me cuenta y cuando resulta sugerente las hago canción. Hace pocos días un amigo dijo que a su primo no le gusta trabajar y menos en la agricultura, suficiente para soltar mi imaginación:
A mi primo no le gusta
Ni el arte, ni la cultura
Pero tampoco le gusta
Que le hablen de agricultura
Por ahí dice mucha gente
Que le gusta vacilar
Siempre anda bien vestido
Sin tener que trabajar…
“Dedico la mayor parte del tiempo a componer, tengo más de cien obras musicales que, en la medida de mis posibilidades y la aceptación de directores y arreglistas, comparto con determinadas agrupaciones .
“La Original de Manzanillo acogió con agrado El carro de Chacho y en proceso se encuentran: El cochero y La cosita, Yamará me popularizó La chica de la esquina, la orquesta Sonora tiene cuatro de mi autoría, Yakaré tiene dos y espera otro aporte.
“La agrupación habanera Mulata Son registra en su poder tres de mis canciones, igual que la orquesta femenina Son Diamante y el mariachi Wilbert, a José Pablo Santoya y su Fusión latina, le aporté dos merengues…
“Entre los géneros que trabajo sobresalen boleros, merengues, cumbias, la fusión…todo depende del estado anímico en que me encuentre”.
PROYECCIONES
“Le enseñé tres de mis composiciones a Moisé Valle, Yumurí, le agradaron y dejamos vivo el contacto para cuando pase la actual pandemia.
“Sueño con entregarle obras a Monolito Simonet, también a Adalberto Álvarez, Leoni Torres, Paulo FG…”
Así piensa este hombre de andar sencillo, radicado ahora en la comunidad bayamesa de Santa Isabel, que asume la inspiración como un despertar a la orden de la canción que lleva dentro, ahí radica la revelación más alta de su filosofía artística.