Con el propósito de humanizar la ardua tarea de derribar caña de modo manual, los directivos de la Empresa azucarera Granma, perteneciente al Grupo Azcuba, se enfrascan desde hace unos años en sustituirla paulatinamente por fuerza mecanizada.
Algo significativo para la inminente campaña es que de un 32 por ciento de caña manual que llevaron a la zafra anterior ahora –como se previó- solo utilizarán el 10 por ciento de los macheteros, con disminución sustancial de la tarea manual.
La estrategia es en un par de años eliminar la fuerza manual pues su completamiento ya nos da trabajo, y ahora estamos capacitando a los operadores para utilizar del modo más conveniente las nuevas tecnologías, dijo en Bayamo Leovis Mesa Ramírez, director de la empresa azucarera local.
Con respecto a la maquinaria agrícola ya entraron a la provincia tres cosechadoras modernas Case 8 800 de esteras, seis nuevas alzadoras, que sumadas a las anteriores versiones de las Case y a las viejas, pero todavía funcionales KTP y KTP 2 M, mejorarán sustancialmente la “caballería” mecanizada; el parque técnico mejora y la cantidad de camiones permite cierta holgura.
Además, un arduo trabajo de recuperación cañera se acomete en toda Granma con énfasis en Bartolomé Masó, unidad de atención a productores que “más trabajo dio en las anteriores campañas”, significó Mesa Ramírez, allí se desbrozan áreas de marabú, se limpian los campos de tocones y se prioriza la siembra en áreas bajo riego.