Con los resultados de los séptimos compromisos particulares, quedaron definidos los ocho conjuntos que animarán la segunda etapa del 41 Campeonato provincial de béisbol en Granma y, por ende, los aspirantes a la corona.

Sin muchas sorpresas transcurrió la fase preliminar de 15 partidos, aunque la inclusión de Jiguaní (9-9), cuarto clasificado de la zona del Cauto, confirmó que en ese territorio el trabajo que se emprendió hace algunos años ya rinde sus frutos.

Como era de esperar, en ese apartado Bayamo (16-2) caminó con holgura y ratificó sus pretensiones de recuperar el título que se agenció Yara en las dos últimas ediciones, mientras el consistente Río Cauto (13-5) y el combativo Buey Arriba (10-8) también se confirmaron en la élite de la pelota granmense.

Por el Guacanayabo avanzaron los favoritos, aunque solo el colero Pilón (1-17) estuvo alejado de la batalla, pues el sorprendente Bartolomé Masó (9-9) y el aguerrido Media Luna (8-10) quedaron a un paso.

En esta ocasión, los yarenses (11-7) no ejercieron el dominio de las últimas campañas, aún así se situaron a solo un juego de los punteros Campechuela y Manzanillo, que concluyeron con idéntico balance de 12 victorias y seis reveses, mientras Niquero (10-8) salió de la mala racha y acuñó su pasaje con una barrida sobre los medialuneros.

Al parecer, los manzanilleros están dispuestos a acceder, por primera vez, a la final y los campechueleros sueñan con regresar a esa instancia, que le ha sido negada hace unos cuantos años.

El próximo martes arrancará la segunda fase y ya se anunciaron los duelos iniciales. A la vista todos son interesantes, pero sobresale el que sostendrán yarenses y riocautenses, en el estadio Mártires del Cauto, de los segundos, quienes vuelven a medirse después del play off final que animaron en la versión 39.

Con los cotejos Bayamo-Niquero, Campechuela-Jiguaní y Manzanillo-Buey Arriba, en predios de los primeros, se completa el programa.

Este segmento decisivo del certamen se jugará a una ronda, y los cuatros elencos de una llave enfrentarán -en subseries de tres encuentros- a los clasificados de la otra, hasta totalizar los 12 desafíos y los 30 de manera general.

Por supuesto, se arrastran los resultados de la primera fase, y al término del calendario los punteros dirimirán el título en un match de cinco juegos y los segundos puestos las medallas de bronce (a tres juegos).

Mañana, en el Salón de protocolo del estadio Mártires de Barbados, de Bayamo, los ocho mentores escogerán los refuerzos, cifra sin límite, pues cada selección deberá completar los 25 jugadores de sus nóminas, al quedar reducidas con la preselección granmense, que ayer fue convocada para el III Campeonato nacional Sub 23.