Washington, – La intensa ola de calor de febrero de 2017 ha sido notable en Australia, incluso para lo normal en ese país, informa hoy la Agencia estadounidense de la Aeronáutica y el Espacio (NASA).
Cuando a principios de mes, un anticiclón se estancó en el centro de Australia, las temperaturas extremas surgieron primero en Australia del Sur y Victoria y luego se extendieron a Nueva Gales del Sur, Queensland y Territorio del Norte.
Con los murciélagos sobrecalentados cayendo de los árboles y los incendios forestales ardiendo fuera de control, las temperaturas rompieron récords en muchas áreas, divulgó la NASA.
El pasado 12 de febrero, la temperatura del aire subió a 46,6 grados Celsius en la ciudad costera de Port Macquarie, Nueva Gales del Sur, rompiendo el récord histórico de la ciudad en 3,3 grados.
Dos días antes, el valor promedio máximo en toda Nueva Gales del Sur alcanzó un récord de 42.4 grados Celsius, un récord que se rompió al día siguiente cuando subió a 44 grados.