La Habana-. Representantes de las grandes religiones mundiales presentes en Cuba unieron sus voces hoy aquí para refirmar su vocación de paz y reclamar el cese de las guerras en el planeta.
En el contexto del Encuentro Internacional titulado Sed de Paz: religiones y culturas en diálogo, que se celebra este año en la ciudad italiana de Asís, líderes hebreos, musulmanes, budistas y cristianos de diferentes denominaciones, rechazaron la pretensión de justificar los conflictos a partir de interpretaciones distorsionadas de la fe.
La reunión, en la explanada de la Catedral de la Habana, sirvió de colofón a una jornada de oración en la cual los miembros de esas expresiones religiosas realizaron sus invocaciones por la paz, cada una según su tradición, en un lugar diferente.
Ninguna fe o religión puede ser chispa de conflictos, afirmó el canciller del Arzobispado de La Habana, Monseñor Ramón Suárez, en la actividad donde niños portaron carteles con los nombres de las naciones en guerra o bajo amenaza de estas, como expresión simbólica del compromiso renovado con la paz.
En un llamamiento, esos religiosos reconocieron el trabajo de Cuba en favor de la paz, en un mundo “donde las guerras parecen haberse convertido en algo normal y muchos se sienten atraídos por la terrible fascinación de la violencia”. Que la lejanía de la guerra no nos haga olvidar que existe y que es terrible, exhortan.
A este evento cultural e interreligioso, organizado por la Comunidad de Santâ€ÖEdigio, asistieron, entre otros, el vicejefe de la Oficina de la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Carlos Samper, miembros del cuerpo diplomático, personalidades de la cultura, académicos y público en general.