Consultorios del Médico de la Familia (CMF) en barrios del municipio de Río Cauto, en Granma, reciben apoyo material de Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS) cercanas.
La CCS Jesús Menéndez Larrondo financió la construcción del CMF en Corralito, en la comunidad La Sal, cuyo costo superó los 50 mil pesos.
Lisbeth Licea Calderón, enfermera del consultorio hace casi 10 años, dice que antes los pacientes eran atendidos en una modesta vivienda prestada por un vecino.
La doctora allí ubicada en octubre de 2016, Nivella Fernández Rodríguez, natural de Manzanillo, asegura que el inmueble, de mampostería y cubierta ligera, es funcional, confortable, con cuarto amueblado, televisor en colores, baño y cocina.
Lisbeth y Nivella añaden que al acudir a ese sitio especialistas a realizar consultas, unos las brindan en el consultorio y otros en caneyes de la cooperativa mencionada.
La CCS José Nemesio Figueredo, por su parte, apoya con alimentos al CMF de Cauto Embarcadero, al cual en fecha reciente entregó dos ventiladores.
Sobre los equipos para contrarrestar la canícula, la doctora Sayuris Montero Caballero, dio las gracias y manifestó: “nos ayudarán a brindar una mejor atención a los pacientes, pues aquí hace bastante calor y trabajamos hasta altas horas de la noche”.
El principal renglón económico de ambas organizaciones campesinas es la producción de arroz, y en menor escala, productos agropecuarios, leche de vaca, miel de abeja y carne de conejo.
Dichas cooperativas fueron declaradas vanguardias nacionales por el Buró Nacional de la Asociación de Agricultores Pequeños (Anap), por sus resultados productivos en 2016, e integración a las comunidades en las cuales se encuentran.
El reconocimiento les será entregado como parte de la celebración, hoy, del Día del campesino cubano, y el aniversario 56 de la creación de la Anap, el 17 de mayo de 1961.
Las CCS son organizaciones primarias de carácter colectivo que posibilitan el uso común del riego, de algunas instalaciones, servicios y otros medios y el trámite global de sus créditos, pero la propiedad de cada finca, sus equipos y la producción resultante, son privadas.