La asociación de Pedagogos de Cuba (APC) otorgó el premio nacional Tradición Educativa, al instituto politécnico industrial Luis Ángel Milanés Tamayo, de Bayamo, por su sobresaliente labor en la formación de obreros calificados y técnicos de nivel medio, durante siete décadas.
El centro educacional, conocido como Escuela Técnica, fue fundada en 1945 y comenzó a funcionar dos años más tarde, en un pequeño local, hasta 1953 en que se construye un nuevo local en terrenos de la familia del general Luis Ángel Milanés Tamayo.
Por indicación del Comandante en Jefe, Fidel, se erigen los locales que ocupa actualmente, inaugurados el 22 de enero de 1964.
En sus aulas y muy bien equipados talleres, por ejemplo, de tornería y fundición, se han formado más de 75 mil obreros y técnicos con un elevado nivel de calificación.
Su director, Delio Jiménez López, dio a conocer que la matrícula del plantel, este curso escolar 2017-2018, es de dos mil 435 matriculados en 36 especialidades, atendidos por 422 trabajadores, de ellos 76 másteres en ciencias de la Educación.
Informó que el sábado próximo, 9 de diciembre, egresarán del centro 175 graduados de técnico medio en varias especialidades, del curso regular diurno, y 56 del curso para trabajadores.
El otorgamiento del premio nacional Tradición Educativa “nos tomó por sorpresa y es una feliz noticia”, declaró Delio Jiménez.
El arquitecto, Máster en Ciencias Alfonso Carulla Figueredo, autor principal del proyecto de restauración realizada años atrás, declaró a Mailenys Oliva, de Radio Bayamo:
“La escuela técnica es un inmueble que se caracteriza por poseer un valor histórico al representar una época, un valor ambiental, porque contribuye a la caracterización de su entorno y un valor de novedad por las soluciones estructurales empleadas por primera vez en el territorio.
“Se suma, también, su marcado valor arquitectónico, el cual está dado por la calidad de sus espacios, bien orientados, totalmente ventilados y naturalmente iluminados, solución que contribuyó de manera temprana al ahorro energético”.
Muchas felicidades para todos los trabajadores: profesores y personal de apoyo a docencia que han sido partícipe de tan merecido reconocimiento, una vez más ponen de manifiesto el gran colectivo educativo que representan, en el cual me formé como técnico y profesional, siempre sacrificados y abnegados ante cada una de las tareas.
Muchas felicidades para todos los trabajadores: profesores y personal de apoyo a docencia que han sido partícipe de tan merecido reconocimiento, una vez más ponen de manifiesto el gran colectivo educativo que representan, en el cual me formé como técnico y profesional, siempre sacrificados y abnegados ante cada una de las tareas.