La Habana, – El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
apoya la recuperación de Baracoa, Maisí, Imías y San Antonio del Sur, los
municipios más afectados del oriente de Cuba tras el paso del huracán
Matthew.
Myrta Kaulard, representante residente del PNUD en La Habana, comentó a la ACN que en respuesta inmediata se realizó
una primera entrega a instituciones nacionales de casi nueve mil 700 lonas y 20 molinos  para  transformar  escombros en materiales de la
construcción.

Explicó que esa agencia de la ONU actualmente adquiere nueve mil lonas más, siete mil 500 kits de cocinas, cinco mil 740 colchones y siete mil 574 juegos de sábanas, y se prevé la compra  de techos de zinc, los cuales pueden aliviar las necesidades de una parte de la población afectada.

Basado en la experiencia de más de 45 años trabajando en Cuba, el PNUD ha iniciado labores para el apoyo a la recuperación de manera resiliente, lo que implica el fortalecimiento de capacidades de  los individuos, sus viviendas, y las comunidades en aras de anticiparse, prevenir, recuperarse y transformarse cuando se  enfrenten
a una crisis en cualquier contexto de desarrollo.

También adapta a Guantánamo un proyecto aplicado con éxito en Santiago de Cuba tras el paso del huracán Sandy, iniciativa centrada, según Kaulard, en utilizar escombros reciclados y materiales locales en función de reconstruir viviendas más sólidas,y la  capacitación de personas con vistas a optimizar la reconstrucción de la comunidad, con la consecuente generación  de empleo.

La colaboración del PNUD se extenderá además, a la recuperación de  planes agrícolas, pequeñas industrias, el sector turístico de Baracoa, y a revertir  los daños que el huracán hizo al patrimonio ambiental de esta región, indispensable para la  sostenibilidad de la vida.

Kaulard expresó preocupación por la situación del patrimonio ambiental del Parque Nacional Alejandro de  Humboldt y el patrimonio subacuático, pues son bienes para el desarrollo sostenible.

La parte ambiental es una muy importante fuente de turismo y recursos, significó, por lo cual resulta esencial restaurar estos espacios de la biodiversidad, sobre todo el parque Humboldt, uno de los
sitios relevantes en la conservación de la flora endémica en el hemisferio Occidental, y fuente de vida y empleo entre los habitantes de las zonas afectadas.

El PNUD y todo el Sistema de Naciones Unidas en Cuba ratifican su solidaridad con la población afectada, y reconocen el esfuerzo de las autoridades cubanas con vistas a evitar la pérdida de vidas y
la rápida recuperación de la región más oriental de Cuba, ratificó
Kaulard.