Manzanillo.- “Subir lomas hermana a los hombres”, dijo el Apóstol cubano José Martí y esa premisa guio esta mañana la visita de trabajo político y gubernamental al Reparto Taíno 1, de esta ciudad del Oriente de Cuba.
Aquí reside gente noble y sencilla que, no obstante las estrecheces de la vida cotidiana, consolidan la unidad en torno a su propia transformación.
En ese empeño no están solos: a los comunitarios los acompaña un hombre que es líder, Yunior Heredia Tamayo que, más allá de las responsabilidades al frente de la dirección municipal de Educación, escucha, convoca y participa.
“Oiga, periodista, mi vivienda tiene sus “problemas” constructivos y se los dije a los dirigentes. Me escucharon, y explicaron las posibilidades que existen y los propósitos para transformar, poco a poco el ambiente.”
Así me comentó Ana Lidia Pérez Barrios, una profesora del seminternado Mariana Grajales, que tampoco pensó dos veces y se “viró” para la tierra.
“Tengo mi parcela. La atiendo con mi esposo en las tardes y ya hemos cosechado plátano, boniato, yuca, calabaza y plantas medicinales. También aportamos al pueblo. A la comunidad hay que ponerle amor.
En el “Taíno 1” viven más de mil 776 personas, agrupadas en 296 familias, de las cuales más de un centenar tiene alguna situación desfavorable, fundamentalmente de viviendas y madres solas.
La calidad del pan, el pobre abastecimiento y la demora en la recogida de desechos sólidos son el trío de las principales insatisfacciones, que tienen en el vínculo y la gestiones administrativa buena cuota para la transformación.
Magalys Ramírez Torres, cocinera en el círculo infantil “pone” el dedo en una llaga: “A mi sí nadie me puede hacer cuento, vivo aquí desde que se construyó la comunidad y hoy hay muchas personas que se sientan a esperar que les resuelvan los problemas.
“Tenemos que ser protagonistas, hay que unirse más a los objetivos comunitarios y aportar”, comenta esta manzanillera, fundadora de los bloques de la Federación de Mujeres cubanas en la zona.
En las conclusiones de la visita, Luis Ortiz Rodríguez, funcionario del Comité Provincial del Partido Comunista de Cuba en Granma reconoció las potencialidades del barrio para encaminar cada tarea.
“Los problemas no pueden sobrepasarnos. Hay que involucrar a todo el mundo con la fuerza de cada representante del pueblo hasta el más sencillo de los habitantes”, concluyó Ortiz Rodríguez.