Bayamo-. La oriental provincia cubana de Granma, donde ya se sienten efectos del huracán Matthew, tiene preparadas las fuerzas que, tras el azote de este sistema, trabajarían de inmediato para reponer el servicio eléctrico, tradicionalmente uno de los más dañados por los ciclones.
Así lo informó hoy a la emisora provincial Radio Bayamo Yolaine Ramírez Carrazana, directora general de la Empresa Eléctrica de Granma, además de reiterar la indicación de que, en el momento actual, lo más importante es hacer todo lo posible para preservar la vida de las personas.
La funcionaria explicó que en el territorio se organizaron fuerzas suficientes para enfrentar a las previsibles necesidades locales o auxiliar a otras regiones.
Precisó que el Consejo Provincial de Defensa (CPD) creó una formación especial, destinada a labores no técnicas, incluido el retiro de cables caídos, en tanto brigadas de la Empresa se encargarían de reponer el servicio, según las prioridades establecidas.
Ramírez Carrazana recordó que Granma recibe energía eléctrica desde Santiago de Cuba y Holguín, y es previsible el derrumbe de una de las torres que soportan cables de alta tensión, lo cual dejaría sin el fluido a los 13 municipios.
Las prioridades para la reposición, dijo, las establece el CDP, tras consultar al Despacho Nacional de Carga y teniendo en cuenta las magnitud de las afectaciones.
Como es lógico, refirió, en tales circunstancias se priorizarían los centros de evacuación de personas y elaboración de alimentos, además de los puntos de abasto de agua, hospitales, policlínicos y otras unidades vinculadas a necesidades básicas de los seres humanos.
Informó que técnicos y especialistas de la Empresa adoptaron las medidas necesarias para evitar que Matthew dañe al parque solar fotovoltaico ubicado en la comunidad de El Yarey, municipio de Jiguaní.
La instalación es la mayor de su tipo en Granma, costó más de cinco millones de pesos cubanos, y beneficia a alrededor dos mil personas, agregó.
La funcionaria reiteró el llamamiento al pueblo a mantener la calma, la disciplina y el máximo de cuidado, a fin de evitar accidentes ocasionados por cables caídos o situaciones similares.
Se estima que, debido a la ubicación geográfica y demás características del territorio, Granma podría ser afectada por vientos hucaranados, lluvias torrenciales, penetraciones del mar, deslizamientos de tierra e inundaciones.
Este lunes tuvieron lugar en la provincia algunas lluvias intensas y chubascos intermitentes, debidos a bandas nubosas generadas por Matthew, y en algunos puntos de la costa sur se reportaron olas de hasta metro y medio de altura.
El Consejo Provincial de Defensa indicó continuar atendiendo con máxima prioridad la protección de las personas, para evitar que alguien quede expuesto a perder la vida.
También ordenó intensificar la elaboración industrial de comestibles y el acopio de viandas, además de alistar mayores cifras de carros cisternas en los municipios, para asegurar la distribución de agua tras el paso del huracán.
La provincia, que ahora tiene más de 840 mil habitantes, fue azotada en octubre de 1963 por el famoso ciclón Flora, el cual dejó unas dos mil personas muertas y más de cien mil sin hogares, en los llanos del río Cauto.
En julio del 2005, el huracán Dennis devastó a los municipios granmenses de Pilón y Niquero, y causó la muerte de 17 cubanos.