París, -El primer ministro de Francia, Edouard Philippe, se reunió hoy con el grupo parlamentario de su partido para cerrar filas y defender la propuesta de reforma del sistema de pensiones, fuertemente contestado en las calles desde hace días.
En relación a su comparecencia prevista para mañana, donde expondrá las líneas maestras del polémico proyecto de ley, aseguró a los diputados de La República en Marcha (LREM) que ‘no hay anuncios mágicos’ que sirvan para ‘detener las manifestaciones’ o responder ‘las preguntas’ de los ciudadanos.
Añadió que su discurso no aplacará la movilización contra el plan, pero tampoco el gobierno cederá en su empeño de llevarlo a la práctica, aunque para ello tenga que llevar a cabo ‘un trabajo muy fuerte de explicación’ a los ciudadanos, a los que consideró mal informados o desconfiados.
Sin atender a más argumentos que los del gobierno, señaló que ‘no nos creen cuando les decimos lo que sucederá si no cambiamos nuestro sistema (de pensiones)’, y ahondando en esa visión enfatizó que ‘la gente no nos creerá hasta que vean el efecto de lo que hacemos’.
Tras dos jornadas de huelga general y seis días de paros masivos en el transporte, varios sondeos mostraron que una amplia mayoría de los franceses están en contra de la reforma de las pensiones tal y como está planteada por el gobierno, por ser injusta y perjudicial para los trabajadores.