Santiago de Cuba-. El Papa Francisco invitó hoy en esta ciudad a servir en la revolución de la ternura, pidió que sus seguidores salieran de casa para ir al encuentro de otros y llamó a compartir gozos y alegrías, esperanzas y frustraciones en su tercera y última Santa Misa en Cuba.
El Sumo Pontífice celebró su liturgia en el Santuario Nacional de la Virgen de la Caridad del Cobre, a unos 18 kilómetros de la capital santiaguera, la segunda en importancia de la Isla.
La iniciativa de que veteranos de la guerra de independencia nacional para que la Virgen fuera considerada Patrona de la Isla, centró la atención de su alocución, en presencia del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
Como María, Madre de la Caridad, queremos ser una iglesia que sirve, que sale de casa, de sus templos, de sus sacristías, para acompañar la vida, sostener la esperanza, ser digno de unidad, dijo el jefe de la Iglesia Católica y del Estado de la Ciudad del Vaticano, ante cientos de creyentes o no, congregados en el templo.
Opinó que de esa forma pueden acompañarse “todas las situaciones embarazosas” de nuestra gente, comprometidos con la vida, la cultura, la sociedad, no borrándonos, sino caminando con nuestros hermanos”.
Tras la liturgia en el Santuario, el Obispo de Roma se trasladará en su auto panorámico a la urbe santiaguera, donde a su paso el pueblo le tributará una calurosa acogida como expresión de regocijo y respeto.
Poco después, en la Santa Basílica Metropolitana Iglesia Catedral, sostendrá un encuentro con las familias cubanas y desde el atrio bendecirá la ciudad por los 500 años de creada la otrora villa, y saludará a las personas que se concentrarán en el céntrico Parque Céspedes.
El Papa Francisco llegó este lunes a Santiago de Cuba, procedente de la vecina Holguín, y del aeropuerto internacional Antonio Maceo viajó al poblado de El Cobre, en el cual se reunió con los Obispos cubanos e hizo una oración privada a la Virgen de la Caridad.
La primera visita a Cuba de un Papa latinoamericano comenzó por la Habana el sábado pasado, donde ofició sendas misas y coincidió con el aniversario 80 del establecimiento de relaciones diplomáticas ininterrumpidas entre Cuba y la Santa sede.
Cuba atesora el privilegio de haber recibido a tres Papas en los últimos 17 años y desde Santiago de Cuba partirá hoy hacia Estados Unidos, por lo que será despedido oficialmente en el aeropuerto internacional.