Programa materno infantil granmense busca mejorar resultados en 2018

Share Button
Por María Valerino San Pedro | 13 enero, 2018 |
0
La salud de la madre y el niño constituye la razón de ser del programa cubano Materno -Infantil/ FOTO Luis Carlos Palacios

Creado con el propósito de garantizar la atención médica integral a la madre y al niño, el Programa Materno-infantil ha logrado alcanzar resultados en indicadores por encima de los países del primer mundo, incluso a pesar de las serias afectaciones que en el seguimiento a las embarazadas de alto riesgo, la efectiva implementación de la genética médica, y otros, provoca el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba.

En 2017 en Granma, la mortalidad infantil tuvo una tasa de 4,7 por cada mil nacidos vivos, con nueve fallecidos más que en 2016, lo cual situó a la provincia por encima de la media nacional, que fue de 4.

La tasa de mortalidad materna fue de 32, la de preescolar de 2,3, la escolar de 2,2 y la de menores de 5 años de 5,8, mientras el índice de bajo peso al nacer de 5,2. Cerraron el año en cero mortalidad infantil los municipios de Media Luna y Yara, mientras los de mayor tasa fueron Pilón con 17,7; Niquero 8,2; Cauto Cristo y Manzanillo 7,7 y Río Cauto 7,5.

Doctora Mariela Véliz Fonseca, jefa del Programa Materno Infantil, en Granma/ FOTO Luis Carlos Palacios

Sobre esfuerzos, resultados y retos que se enfrentan informa la Doctora Mariela Véliz Fonseca, especialista de Primer grado en Medicina General Integral y Pediatría, Máster en Atención Integral al niño, y jefa del Programa Materno Infantil, en Granma. En su rostro se vislumbra responsabilidad y deseos de realizar sueños y planificaciones, de “tocar con la mano” cada detalle en cualquier sitio de la provincia, por intrincado que este sea.

¿Cuáles fueron las causas del resultado de la mortalidad infantil?

-Las hubo objetivas y subjetivas, no obstante los grandes esfuerzos realizados de manera general, contar con el recurso humano necesario, y recibir una inyección de tecnología de diagnóstico prenatal. En algunos municipios el programa precisó de mayor atención, organización y seguimiento.

“Las principales causas de los fallecidos estuvieron relacionadas con las afecciones perinatales (13), la prematuridad, con un índice de 0,6 y por ende la enfermedad de la membrana hialina y la hemorragia pulmonar, lo cual contribuyó a las malformaciones congénitas.

“En 2017, tuvimos nueve malformaciones que dieron al traste con la vida de los bebés, tres por encima del año anterior, y aunque se hicieron diagnósticos prenatales los padres decidieron continuar con el embarazo, pero igualmente hubo fallos en la atención y prevención de las malformaciones congénitas, porque todas son prevenibles.

“Con el consumo diario del ácido fólico en la edad fértil, se previenen malformaciones congénitas cardiovasculares y del sistema nervioso central.

“Podemos señalar como un aspecto que incidió en no lograr una atención prenatal ideal para las mujeres, el inadecuado comportamiento social de algunas gestantes, por lo cual hacemos un llamado a mejorar ese aspecto.

“Aunque los resultados no fueron como deseábamos, no estamos desanimados, pues fue un año en el que se trabajó duro, con una alta preparación, al contar con la última actualización en todos los protocolos de atención al niño, a las mujeres y a las gestantes y la literatura en las especialidades de Atención primaria, Obstetricia, Pediatría y Neonatología”.

Granma es la provincia con mayor índice de embarazo en la adolescencia, ¿qué prevén hacer para revertir esa situación?

-Comenzamos el 2018 con una estrategia conjunta con Educación y la Federación de Mujeres Cubanas en las comunidades, ya tuvimos el primer contacto para trazar pautas, a fin de, finalmente, dar al traste con esa problemática, que requiere un trabajo multisectorial en el cual debe estar involucrado también el propio sector nuestro con los departamentos de Promoción y Educación para la Salud y de Salud Escolar.

“Sin dudas lo esencial es la prevención, la comunicación, la planificación familiar y la labor diferenciada con las adolescentes”.

¿Cómo inició el 2018 y cuáles son los propósitos?

-Hasta hoy 10 de enero (fecha de la entrevista) mantenemos todos los indicadores en cero, solo el índice de bajo peso, con 13 niños nacidos en esa situación, pero reducimos en cinco con relación al año anterior.

“El principal reto es alcanzar una tasa de mortalidad infantil por debajo de cuatro; además, disminuir el índice de bajo peso al nacer a 4,5 o menos; terminar con la mortalidad materna en cero; reducir la muerte preescolar, aunque en 2017 disminuyó al 50 por ciento, y lograr resultados favorables en la de menor de cinco años.

“Ya tenemos sobre el tapete un trabajo planteado, y tiene que ver con la disminución de las cesáreas, algo que contribuye a más baja tasa de mortalidad materna, el año precedente fuimos la segunda provincia del país con menor índice de cesárea, con 17, ahora nos proponemos por debajo de 15.

“Trabajaremos este año con dedicación y amor”.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *