París.-El Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) promueve en Cuba una sociedad inclusiva donde no haya espacio a la discriminación, y menos la basada en prejuicios, aseveró en Francia la directora de la institución, Mariela Castro.

Tal es el caso de la labor para fomentar la integración social de personas transexuales, tema complejo que amerita un estudio profundo y al cual la especialista dedicó su investigación de doctorado.

El propósito es “contribuir al cambio de una cultura homófoba y transfóbica”, enfatizó en declaraciones a Prensa Latina.

Indicó que si bien el fenómeno está presente en todo el mundo, ella centra su mirada en Cuba, que es donde vive y trabaja: “yo quiero que Cuba cambie porque creo que es un componente fundamental de la Revolución que no haya discriminación, y menos la basada en prejuicios”.

Mariela Castro explicó que durante el proceso investigativo identificó varios factores sociales que ayudan a la integración de estas personas en la nación caribeña, como la igualdad de oportunidades para todos los ciudadanos que les garantiza, por ejemplo, el acceso a la educación.

Sin embargo, agregó, no tienen igualdad de resultados porque muchas veces estas personas son humilladas y rechazadas, y eso las lleva a terminar muy temprano su periodo escolar, lo que a su vez incide en que no tengan luego la calificación profesional suficiente para encontrar trabajos de mayor remuneración.

Frente a esa circunstancia, “la responsabilidad esencial está en la sociedad, en que existan políticas y mensajes educativos para que la familia, la escuela y los espacios laborales asuman la responsabilidad que les toca, así como los diversos espacios de participación para que puedan verdaderamente integrarse”, señaló.

La directora del Cenesex mencionó el ejemplo de un venidero proyecto de impartir un taller sobre el tema del cooperativismo a personas transexuales, mientras un grupo de 25 ya están interesadas en formar una cooperativa de corte y costura, lo cual resulta fundamental para que tengan oportunidades de desarrollo laboral.

La experta mencionó que ayudar a este trabajo de integración social es el principal objetivo de la exposición Translúcidas, del fotógrafo Paolo Titolo, que fue inaugurada ayer en la parisina Casa Europea de la Fotografía y estará abierta al público desde hoy hasta el 30 de octubre.

“Detrás de cada retrato hay una historia muy compleja”, sostuvo Mariela Castro, quien agregó que en las imágenes se aprecia “el dolor, la necesidad de ser dignificadas, su deseo de reafirmar la identidad de género que tienen”.

En consecuencia, añadió que el trabajo fotográfico de Titolo ha sido un soporte fundamental para poder comunicar la esencia del trabajo de integración social de estas personas.

La directora del Cenesex expresó el agradecimiento a la Casa Europea de la Fotografía por acoger la muestra, un espacio que calificó de muy profesional y respetuoso hacia los trabajos que se presentan.

El director de la institución, Jean-Luc Monterosso, resaltó el valor estético y social de la exposición y afirmó que es “un testimonio muy vivo y emotivo que puede ayudar a que la gente tome consciencia sobre las dificultades tremendas de estas personas que buscan su identidad”.