La Habana-. El General de Ejército Raúl Castro Ruz, reelecto Primer Secretario del Comité Central, dijo que en el 7mo. Congreso del Partido se adoptaron acuerdos de trascendencia estratégica para el presente y el futuro de la nación.
En sus palabras de clausura del más importante evento político del país, Raúl calificó de intensas las jornadas transcurridas desde su inauguración el sábado último, en el Palacio de Convenciones de La Habana, con la asistencia de casi mil delegados y 280 invitados.
Explicó que el Congreso aprobó el Informe Central y las Resoluciones; se pasó revista al cumplimiento de los Lineamientos de la política económica y social del Partido y la Revolución, y se acordó su actualización, expresada en 274 lineamientos; se debatió el informe sobre el cumplimiento de los Objetivos de la Primera Conferencia Nacional del Partido y se tomaron decisiones para continuar fortaleciendo su papel.
Al propio tiempo, el cónclave acogió favorablemente los proyectos presentados acerca de la conceptualización del modelo económico y social y las bases del plan nacional de desarrollo económico y social hasta 2030 y aprobó iniciar un debate amplio y democrático con la militancia del Partido, de la Unión de Jóvenes Comunistas, representantes de las organizaciones de masas y de diversos sectores de le sociedad.
Refirió que ese proceso debe concluir antes de que finalice este año, de manera que el nuevo Comité Central las apruebe definitivamente, e indicó que por la gran complejidad de los citados proyectos, se hace necesario adoptar todas las medidas en interés de asegurar, en primer lugar, su comprensión, por lo que es necesario una rigurosa preparación previa de quienes conducirán la discusión.
Raúl consideró que en un asunto de esta naturaleza es esencial lograr el apoyo consciente de la gran mayoría y para ello es imprescindible escuchar, razonar y tener en cuenta la opinión de la militancia y del pueblo en general.
Recordó que el proceso de actualización del modelo económico iniciado desde el 6to. Congreso, no es tarea de uno o dos quinquenios, y subrayó que el rumbo ya está trazado, proseguiremos a paso firme, sin prisa, pero sin pausa, con capacidad organizativa, para hacer los cambios necesarios, sin improvisaciones.
La actualización del modelo y la construcción de un socialismo próspero, sostenible e irreversible en Cuba exige que sean preservados y potenciados toda la justicia e igualdad, que han servido de base a la Revolución.
Una Revolución de los humildes, por los humildes y para los humildes, como la definió el compañero Fidel, con una innegable obra social construida, jamás encontrará solución a sus problemas de espaldas al pueblo o con la restauración del capitalismo, que llevaría a terapias de choque, y destruiría la confianza de la mayoría de los ciudadanos en torno a la Revolución y el Partido, sentenció Raúl.
“En Cuba, reitero, nadie quedará desamparado”, y adelantó que los acuerdos de este histórico Congreso tampoco serán engavetados.
“Debemos asegurar su cumplimiento con orden, disciplina y exigencia, convicción de futuro y mucha intencionalidad”, a lo cual contribuirá haber ratificado la decisión de que en los plenos del Comité Central, al menos dos veces al año, se verifique la marcha de la actualización del modelo económico y el plan de la economía, incluso tantas veces como sea necesario.
Expresó que el análisis de estos temas proseguirá en las sesiones del Parlamento, cuyo papel en la aprobación del marco legislativo continuará siendo decisivo.
Sobre los recién electos miembros del Comité Central, el Primer Secretario dijo que son 55 los nuevos integrantes de ese órgano, todos menores de 60 años, dándole así cumplimiento a la edad máxima aprobada por el 7mo. Congreso para ingresar a ese organismo.
Esa medida, precisó, busca garantizar el constante rejuvenecimiento de la dirección del Partido.
Apuntó que el límite de 60 años conllevó a excluir de la candidatura a valiosos cuadros que ocupan altas responsabilidades partidistas, estatales y gubernamentales con trayectoria y capacidad probada para integrar este organismo superior.
Raúl agregó que las normas que fijan los límites de edades deberán establecerse con racionalidad en los documentos rectores del Partido y las organizaciones de masas, y por decisión de la Asamblea Nacional abarcar igualmente a los organismos del Estado y el Gobierno, de manera que sean definidos con precisión los cargos cuyo desempeño no debiera ejercerse por personas mayores de 70 años.
El General de Ejército informó que el 7mo. Congreso aprobó emplear regulaciones más flexibles que permitirán en este período de tránsito contar con reservas para la renovación ulterior del Comité Central, sin tener que esperar al Octavo Congreso.
Raúl encomió la trayectoria de los cinco nuevos integrantes del Buró Político y subrayó que no son fortuitas ni improvisadas estas promociones, pues son compañeros que acumulan una rica hoja de servicios desde la base, ejerciendo las profesiones de las que se graduaron en la universidad.
Raúl agradeció “el honor que significa haber sido elegido por segunda vez, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba”.
Con la certeza de que mi misión principal es defender, preservar y continuar perfeccionando el Socialismo cubano y no permitir jamás el retorno al capitalismo, enfatizó.
Adelantó que dedicará el tiempo necesario al proceso de reforma de la Constitución de la República para introducirle los ajustes pertinentes, luego de 40 años de vigencia, y a tono con los cambios acaecidos en el plano internacional y las modificaciones resultantes del proceso de actualización del modelo económico y social.
El Primer Secretario del Partido definió como las misiones principales de la organización, el desarrollo de la economía nacional, junto a la lucha por la paz, la unidad y la firmeza ideológica.
Precisó que esas orientaciones no pueden quedarse en una simple frase, “es preciso llenarlo de contenido concreto en acciones y medidas que permitan hacer realidad la visión de una nación soberana, independiente, socialista, democrática, próspera y sostenible”.
El también Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, envió un mensaje de apoyo a los pueblos del tercer mundo, en particular los de América Latina y el Caribe, que se enfrentan a las pretensiones de la derecha y el capital transnacional de enterrar los logros sociales alcanzados en décadas de lucha.
Reiteró la solidaridad de Cuba con el pueblo brasileño y la presidenta constitucional Dilma Roussef, que enfrenta un golpe de estado parlamentario organizado por la derecha oligárquica y neoliberal, alentada por el imperialismo en contra de los avances políticos y económicos y las conquistas sociales alcanzadas durante los gobiernos del Partido de los Trabajadores.
Llegue también nuestro saludo fraternal a los partidos comunistas y otras fuerzas y partidos políticos, movimientos sociales y clases trabajadoras del planeta que luchan contra el hegemonismo imperialista, añadió.
Al referirse a la devastación que dejó el sismo de 7.8 grados que afectó varias provincias de Ecuador, reiteró el apoyo de Cuba en las labores de atención a los damnificados y precisó que un equipo de rescatistas y el refuerzo médico enviado el propio domingo ya se unieron a los más de 700 colaboradores que trabajan en ese país, al tiempo que mostró la disposición de incrementar esa ayuda de ser necesario.
Rememoró que hoy 19 de abril se celebra el aniversario 55 de la victoria sobre la invasión mercenaria en Playa Girón, bajo la dirección directa en el teatro de operaciones del líder de la Revolución, Fidel Castro Ruz, y rindió homenaje a los caídos en esta gesta histórica.
Raúl agradeció de todo corazón la presencia de Fidel y sus brillantes palabras en la clausura del 7mo. Congreso, que concluyó tras cuatro días de sesiones de trabajo.