“Cada gota de leche materna es una vida salvada”, acotó la doctora María Cristina Cedeño Esturo, especialista de Primer grado en Neonatología del hospital Carlos Manuel de Céspedes, en Granma, durante el acto por el Día mundial de las madres donadoras de leche materna.
“La leche humana tiene un alto valor en el desarrollo y maduración del sistema nervioso central del recién nacido, en la protección inmunológica y de diferentes patologías en el niño, lo que otorga fundamentos más valiosos para recobrar la cultura del amamantamiento”, acotó la neonatóloga.
María Cristina recordó que no todas las madres pueden amamantar a sus hijos, ya sea por su estado posterior al parto, por su estado, los requerimientos especiales, por alguna contraindicación materna o por el estado del recién nacido, ya sea prematuridad extrema, bajo peso, los sometidos a cirugías, los portadores de malformaciones congénitas y los gravemente enfermos, a quienes se les imposibilita la succión directa del pecho de la madre.
Con el objetico de garantizar la alimentación con leche materna a estos infantes, se crean los bancos de leche humana en el marco del programa de cooperación Unicef y Minsap.
El banco de leche provincial, Miel para la vida, puesto en marcha el 8 de marzo de 2012 cuenta con un total de cinco mil 587 donantes hasta la fecha y un volumen de leche recolectada de mil 210 litros, de 800 mililitros, beneficiando dos mil 394 niños lo que incide positivamente en la reducción de la tasa de mortalidad infantil.
En 2016 se extiende esta experiencia a la comunidad, representado por una licenciada en enfermería en cada área de salud encargada de orientar y apoyar a las madres que lactan así como la captación de donantes.
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, podrían salvarse en el mundo más de un millón de vidas infantiles al año si las madres solo alimentaran con la leche de sus pechos a sus hijos durante los primeros seis meses de vida.
El Día mundial de las madres donadoras de leche materna, a celebrase cada 19 de mayo, surge a raíz del V Congreso brasileño de leche materna y del I Congreso iberoamericano en 2010, con el objetivo de difundir el objetivo de esta noble práctica que beneficia a recién nacidos y lactantes.
Durante el acto celebrado en Granma se estimuló a una representación de madres donantes voluntarias de leche materna y se exhortó cumplir con la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de vida.