De hecho, la ONU fue creada como un lugar para propiciar el diálogo, subrayó el diplomático eslovaco.
Mandela nos mostró que la paz era más valiosa que los diamantes, el oro o la plata, y ahora, el organismo multilateral se orienta a un modelo más proactivo en temas de prevención de conflictos, apuntó.
Su lucha contra la injusticia, la opresión y el racismo debe inspirarnos en nuestra labor, recalcó, así como sus enseñanzas sobre la tolerancia.
En todos los rincones del mundo vemos como aumenta la intolerancia, el odio, el racismo, los prejuicios, la discriminación, el irrespeto por la humanidad, lamentó Lajcak y convocó a mantener vivo el legado de Mandela y enfrentar esos problemas.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, convocó a celebrar la vida y los logros de ‘uno de los más grandes líderes de nuestra época’.
Tuve la suerte de reunirme con él en varias ocasiones y me impactó su sabiduría, su determinación y compasión. Madiba es como un lucero en materia de valores universales, aseveró.
Guterres también rememoró cómo su compromiso con la igualdad lo llevó a estar tras las rejas, pero nunca perdió la fe.
Sus llamados en pro de la solidaridad y su gran sentido de servicio inspiran a la humanidad, y motivan a las personas a marcar la diferencia y a luchar por construir un mundo mejor, indicó el titular de Naciones Unidas.
En este Día Internacional de Nelson Mandela honramos su memoria y reflexionamos sobre cuánto camino nos queda por recorrer para alcanzar sus aspiraciones, dijo.
Como él mismo nos enseñó, superar la pobreza no es un acto de caridad es un hecho de justicia y urge dar aplicación práctica a sus palabras y trabajar juntos por un futuro mejor, concluyó el secretario general.