En horas tempranas de hoy fueron llevados hasta su hogar, en la ciudad de Bayamo, los restos mortales del matrimonio formado por Julio Toribio Espinosa Licea y Maricela Peña Blanco, fallecidos en el accidente aéreo ocurrido el viernes 18 de mayo en La Habana.
A rendirles postrer tributo acudieron, de inmediato, familiares, amigos, vecinos y las máximas autoridades políticas y gubernamentales en la provincia de Granma y el municipio de Bayamo.
Entre las varias ofrendas florales colocadas en derredor de fotos de ambos, estaban una en nombre del pueblo de Cuba y dos del Buró Ejecutivo del Comité provincial del Partido Comunista de Cuba (PCC), en Granma.
Federico Hernández Hernández, primer secretario del PCC en Granma declaró que el momento actual es de mucho dolor, que está creada una comisión para dar toda la atención necesaria a las familias de los granmenses que perdieron sus vidas en el siniestro del Boeing 737 que cubría la ruta Habana- Holguín.
Julio Nació en Manzanillo, segunda ciudad en importancia en la actual provincia de Granma, el 16 de abril de 1939, y Maricela en Banes, Holguín, el 18 de octubre de 1951.
Cuentan familiares cercanos que laboraron en la Escuela de Medicina de la Universidad de Oriente, en Santiago de Cuba. Julio fue, además, dirigente del sector agrícola.
“Nos llevábamos como familia y fue muy duro verlos retornar muertos a su hogar”, dijo Antonia Peña Ayala, oriunda, también, de Banes, y vecina.
Antonia añadió que Julio y Maricela estaban juntos hace muchos años, pero no se habían casado, y fueron a la Habana a casarse, porque él tenía la intención de viajar a México, a visitar a una hija -que tuvo con otra esposa- que reside en la nación azteca.
Esa información la confirma Yoandri Jomarrón Peña, sobrino de Maricela, quien residía con su tía y el esposo de esta. Con los ojos nublados por las lágrimas y la voz quebrada, Yoandri dice que Maricela fue para él una madre, desde que perdió a la que lo trajo al mundo.
De Bayamo, los restos de la pareja fueron trasladados a la funeraria de Manzanillo, donde igualmente se le tributa póstumo homenaje.
En horas de la tarde de hoy serán sepultados en la Necrópolis de esa ribereña urbe, en la cual descansa la única hija que tuvieron Julio y Maricela, la cual falleció muy joven a causa de un ataque de asma.
Allá, es seguro, muchas personas acudirán a darles un último adiós, en nombre del pueblo granmense y de toda Cuba.
No los conoci pero me sumo al dolor de esa familia que debe estar destrozada por tanto sufrimiento, EPD los dos
No los conoci, pero no puedo dejar de dar mi pesame a todos los familiares y amigos de las victimas. Hoy se entienden aquellas palabras de Fidel, en 1976: el dolor no se comparte, el dolor se multiplica. Y es asi, no es comparable su dolor al nuestro, pero de algo pueden estar seguros todos, tambien le duele a Cuba como si hubieran sido nuestra Familia… Fuerza a todos, la vida continua, el corazon esta estrujado, pero hay otros que todavia nos necesitan. Descansen en Paz…
su dolor se hace nuestro
Una verdadera tragedia,lás más sentidas condolencias a sus familiares y amigos…
soy bayamesa de pura sepa, pero vivo en la habana hace poco tiempo, siento un gran dolor en mi corazon por la perdida de estas familias, mis condolencias a todos esas personas que han perdido a sus familias
Muchas gracias, lectora amiga.
que tiste todo lo ocurrido que dios les de un poco de paz a sus familiares
mis mas sentidas condolencias a familiares, amigos, vecinos, hermanos de religión, es muy triste la perdida de un ser querido en tan dolorosas circunstancias, que dios los acoja en su seno y descancen en paz
Mis más sinceras condolencias a todos los familiares, A nombre de todos ls bayameses que lloramos su partida les digo que su dolor también es nuestro dolor.